El Museo de Arte Contemporáneo de Rosario (Macro) volvió a cambiar su imagen exterior por segunda vez en menos de tres meses y desde este sábado se puede leer “Hola, mamá” a la vera del río Paraná. El mensaje en la fachada sur es el anuncio de la próxima obra de Martín Ron a partir del fracaso inusitado de la renovación de los silos Davis.
El saludo llamó la atención de muchas personas que recorrieron la Calle Recreativa al día siguiente. Incluso generó críticas de quienes creyeron que ese es el resultado final del proyecto que anunció la Municipalidad luego de la cancelación de la performance “Paint is not dead”, ganadora del concurso público nacional en agosto de 2023.
El artista bonaerense llegó a la ciudad el último viernes y puso manos a la obra en vísperas del Día del Madre. Después de esta intervención inicial pintará un mural gigantesco para tapar las letras celestes en vez del diseño en rosa que habían propuesto los arquitectos Florencia Meucci y Manuel Cucurell.
Luego de la firma inicial sobre la ribera del Paraná, Ron planea terminar el proyecto antes de fin de año. Si bien aceptó la propuesta financiada por empresas privadas, la Secretaría de Cultura y Educación debe esperar que cumpla con otro contrato en el exterior para completar la renovación del Macro.
¿Por qué los silos Davis de Rosario dicen “Hola, mamá”?
La fachada exterior del Macro quedó pintada con la frase “Hola, mamá” porque el artista a cargo del nuevo proyecto siempre la escribe a modo de anticipo de sus obras. “En realidad es un chiste. Es un grafiti que empecé a desarrollar de grande sin querer”, comentó el muralista hace un par de años.
Martín Ron pintó un mensaje para su madre en vez de un saludo privado y “a la gente le encantó”. Desde entonces lo repitió en el inicio de cada intervención como su propio “coming soon” e incluso hizo stickers.
El próximo mural de los silos Davis se puso en marcha a partir de donaciones de las siguiente empresas: Pascual Construcciones, Ángel Álvarez SA, Nasini SA, Tersuave, IMG Rental SRL, Sancor Seguros, AMR Salud y Tarjeta Naranja. La Municipalidad cedió la fachada para la obra y evitó hacerse cargo del financiamiento, pero no zafó de las críticas.
Los autores del proyecto anterior recordaron que el concurso del Macro atrajo 282 propuestas para renovar la imagen del museo. Dado que no había orden de mérito detrás del veredicto del jurado y el presupuesto ya se había ejecutado, las autoridades locales prefirieron buscar una alternativa con aportes privados en vez de lanzar una nueva convocatoria o completar la performance con pintura rosa.
