Nuevamente, otra vida con marca mafiosa se cobra la vida de una persona en Bernardo de Irigoyen. Dos hombres se tirotearon, motivo que derivó en la muerte de uno de ellos y en la detención del otro.
La balacera ocurrió entre los ciudadanos Diego Pimentel de 31 años y Adilson Zang de 33, que terminó con la muerte de Pimentel, quedó registrada por una cámara de seguridad. La secuencia del registro fílmico da cuenta de una fuerte discusión entre ambos, frente al portón de entrada de la propiedad de Zang.
Se presume que Diego Pimentel le vino a recriminar a Zang por su primo, Maximiliano Pimentel (24 años), quien está desaparecido desde hace varios días.
Según lo que se puede observar, Pimentel llega en una camioneta junto a su tío Antonio (padre de Maximiliano) y luego de mantener una discusión con el dueño de casa, se efectuaron disparos de los cuales varios de ellos impactaron contra el primero que provocó su muerte en el lugar. Su tío salió corriendo de la escena.
El Juzgado de Instrucción N°1 de San Pedro, a cargo de Ariel Belda Palomar, ordenó el allanamiento de la casa del detenido, en donde secuestraron una pistola Taurus 9 mm, dos cargadores con 16 proyectiles, 83 municiones de 9 mm y 50 de calibre 38.
La Policía Científica halló al menos 8 vainas servidas dispersas en la vereda de la casa del detenido. Consecuentemente, el detenido fue sometido al guantelete de parafina y puesto a disposición de la Justicia.
Crímenes similares en la frontera de Argentina y Brasil
El enfrentamiento a balazos ente Pimentel y Zang, es la prosecución de una serie de hechos sangrientos que se reiteraron en la frontera seca entre Bernardo de Irigoyen y Dionisio Cerqueira, en el último tiempo. Solo en los últimos 12 meses, se han producido cuatro asesinatos allí.
En esa dirección, en mayo del año pasado se produjo el crimen del abogado entrerriano Juan López (50 años), perpetrados por dos sicarios –presumiblemente brasileños- que se desplazaban en motocicleta.
También en noviembre del año pasado, Rafael Antúnez de Olivera de 45 años, fue asesinado a tiros en el centro de la ciudad ante la presencia de su hijo de 13 años. La víctima esperaba la luz verde del semáforo al mando de su camioneta, cuando fue acribillado a balazos.
En febrero de este año, Ariel Camargo De Lara de 19 años, fue asesinado de un disparo en la cabeza, después enterrado en una zona rural de San Pedro. El viernes pasado, Diego Pimentel fue asesinado por Adilson Zang y el primo del fallecido, sigue desaparecido.