Julieta Tirabassi contó a través de su cuenta de Twitter una historia que revolucionó las redes sociales. Resulta que el fin de semana largo viajó a su ciudad y dejó a Juana, su perra, en la guardería, pero ella se escapó y nadie podía encontrarla.
La joven no podía llevar a su mascota con ella, por lo que no tenía opción que dejarla bajo el cuidado de profesionales. “Me fui a mi ciudad por el finde largo, y no pude llevar a Juana como hago siempre, así que quedó en una guardería. Hoy a la mañana, tipo 9 am, me avisaron que se había escapado y no podían encontrarla”, empezó contando Julieta.
Tirabassi estaba a más de 100 kilómetros “sin saber qué hacer”, entonces su novio salió a buscar a Juana, a lo que “se sumó más gente”. Alrededor de las 11 am había “unas 4 cuadrillas buscándola”.
Pero lamentablemente ya no había rastros, una moto primero la seguía pero la perdió de vista. Entonces, la chica salió volando a Rosario para encontrar a su fiel compañera. “El viaje se me hacía eterno, pero no dejaban de llegarme mensajes de personas que compartían la búsqueda en redes, y otras que se sumaban a rastrillar la calle. Todos sin pistas”, contó ella.
El reencuentro entre Julieta y su perra Juana
Por el fin de semana largo, era muy probable que el tránsito fuera más caótico de lo normal. De todas formas, la joven emprendió viaje para localizar cómo sea a Juana. “No agarramos el acceso a Rosario que agarramos siempre. En el estado de alteración, agarramos otro camino, yo venía diagramando una estrategia de búsqueda a ver por dónde arrancaba. Y en eso, mi vieja gritó “¡Juana!” y estaba mi perra caminando por Circunvalación. En contramano”, escribió la chica.
“A 8km de donde se escapó, por la Circunvalación, en contramano, cansada, perdida y asustada, me la crucé. Me bajé corriendo y entré en el mismo estado que ella, crucé los carriles sin darle bola a los autos y arranqué a correr, Juana se asustó y empezó a correr más”, relató Julieta.
La perra empezó a cruzar todos los carriles de Circunvalación, los autos frenaban, trataban de agarrarla, pero se escapaba. “Yo seguía corriendo. Uno de los autos que estaban en la fila era un móvil de la policía federal, me subieron y en el patrullero, empezamos a seguir a Juana que no paraba de correr, ahora en el mismo sentido que los autos. En un momento, un auto la cerró y abrió la puerta. Juana se subió y se acostó. Totalmente asustada, pero también cansada. Todos empezaron a aplaudir”, siguió el hilo de Twitter.
Finalmente, Julieta llegó hasta donde estaba ese auto y se reencontró. “El llanto era total, mío pero también de los policías, de la gente de los autos que frenaron, de todos. Me volvieron a buscar, llamé del celular de una piba, porque en la ceguez me había bajado del auto sin mi teléfono, sin nada. Cargué a Juana en el auto y estamos en casa. Está durmiendo”, manifestó.
Después del mal momento que tuvieron que pasar, la joven aseguró que no puede creer que fue lo que pasó y la conexión que tiene con su perra. Juana caminó más de 8 km “sin saber andar sola por la calle, cruzó toda la ciudad, cruzó Circunvalación un día de finalización de fin de semana largo, con tráfico acorde y no tiene absolutamente nada, sólo gastadas las huellitas, y cansancio extremo”.
“Por casualidad, pasé por el lugar indicado, en el momento justo y nos cruzamos, porque también podría no haberla visto. Algo la cuidó todo el trayecto y la guío a ella hasta mi, a mi hasta ella. Te amo, Juana. Gracias por salvarme una vez más”, concluyó Julieta.