Tras el arresto y posterior imputación de un tercer involucrado en el asesinato de Ivana Garcilazo, la hincha de Rosario Central que recibió un piedrazo mortal en la cabeza cuando volvía de ver el clásico rosarino, los esfuerzos se enfocan en encontrar a Damián Reifenstuel, el único sospechoso que continúa prófugo de la Justicia.
Las investigaciones pudieron determinar que Reifenstuel, quien es indicado como el que lanzó la piedra que mató a Ivana, se escapó a Bolivia por un paso no custodiado a poco del crimen. Si bien rige un alerta roja de Interpol para encontrarlo, el sospechoso continúa evadiendo a las autoridades.
En ese contexto, Silvina Garcilazo, hermana de la joven muerta, viajó al país limítrofe con intenciones de encontrar al prófugo por su cuenta y llevarlo de vuelta para someterlo a la Justicia. La mujer se grabó en las calles de Santa Cruz de la Sierra, donde suponen está escondido el profesor de química.
“Tuvimos que viajar por nuestra cuenta, ya que teníamos varios testimonios de testigos que nos decían que Damián estaba acá”, describió Silvina en el video. Y agregó: “Como la gente que tiene que hacer algo no lo está haciendo, decidimos viajar por nuestra cuenta. Imprimimos folletos para que la gente de Bolivia nos ayude a encontrarlo”.
La mujer contó además que la familia llegó a endeudarse para poder viajar a Bolivia y remarcó: “vamos a hacer todo lo que haya que hacer para encontrar a Damián Reifenstuel, de hecho lo estamos haciendo. Ivana no va a ser una víctima más”.
¿QUIÉNES MATARON A IVANA GARCILAZO TRAS EL CLÁSICO ROSARINO?
El Ministerio Público de la Acusación (MPA) denunció que Ivana Garcilazo fue asesinada durante el ataque de tres hinchas de Newell’s que la apedrearon mientras volvía de la cancha de Central. Cuando estaba a un par de cuadras del estadio rojinegro, la víctima cayó herida en la cabeza y murió en el acto.
De acuerdo a la evidencia de la Fiscalía Regional de Rosario, los coautores del crimen fueron Masson, Ariel Cabrera y Damián Reifenstuel. Este último es el único que se mantiene prófugo desde entonces. Los investigadores creen que se fue del país hace dos semanas y viajó a Bolivia, de modo que hicieron un pedido de captura internacional.
Ávila determinó que los tres sospechosos vieron el partido en una casa ubicada sobre Catamarca al 3400. Después se fueron caminando hasta la zona de la cancha de Newell’s. Luego del asesinato de Garcilazo y el intento de agresión a su novio, huyeron por separado.
