Un descubrimiento tan inquietante como inesperado alteró la calma de Mar de las Pampas en la antesala de las fiestas: en la arena de la playa apareció un frasco que contenía un dedo humano para un ritual Umbanda, lo que activó de inmediato un importante despliegue policial.
El episodio reavivó el interés y la preocupación en torno a la enigmática figura conocida como la “mujer de los cuchillos”, una presencia que ya había provocado alarma y comentarios en el sur del partido de Villa Gesell.

El hecho se inició a partir de un llamado que alertó a la estación de policía comunal 3ª sobre la aparición de un frasco extraño en la zona de la playa, a la altura de la calle 36.
Al arribar al lugar, los agentes aislaron el sector y dieron intervención a la Policía Científica, que tras las primeras pericias confirmó el estremecedor hallazgo: en el interior del recipiente había una falange humana.
Un extraño ritual, un accidente y una secuencia tan insólita como inquietante
Mientras los peritos realizaban las tareas en la zona, una vecina aportó un testimonio decisivo: aseguró haber visto, instantes antes, a una mujer con una mano vendada y el frasco en la otra.
Según relató la testigo, la propia mujer le explicó que había sufrido un accidente en su casa y que, por creencias vinculadas a la religión umbanda, decidió arrojar el dedo al mar como parte de una ofrenda ritual.
Con ese dato, la investigación tomó velocidad. Desde el hospital municipal confirmaron que el día previo una mujer había ingresado por la guardia con la amputación de un dedo, recibió atención médica y fue dada de alta ese mismo día. Un detalle no menor: se retiró del centro de salud con la falange amputada en su poder.

A partir de esa información, los investigadores lograron identificar rápidamente a la involucrada. Se trataba de la misma mujer que días antes había sido detenida en Villa Gesell tras protagonizar un episodio de extrema violencia.
Sobre ese antecedente, fuentes de la Secretaría de Seguridad local explicaron al portal Central de Noticias Madariaga que la policía acudió al lugar luego de reiterados llamados de vecinos que alertaban sobre una mujer que realizaba “rituales” en plena vía pública.
En ese contexto, la acusada se habría resistido esgrimiendo una cuchilla de 45 centímetros, lo que obligó a los efectivos a realizar disparos disuasivos para poder reducirla.
Pese a la gravedad del hecho y los antecedentes recientes, el Ministerio Público Fiscal tomó intervención y dispuso iniciar actuaciones bajo la carátula de averiguación de ilícito.
































