La megacausa que investiga al juez Walter Bento derivó en la detención de Alfredo Raúl Rosaspina, acusado de ser el líder de una banda que realiza contrabando entre Chile y Mendoza. Además, con la misma línea investigativa también cayó Walter Osvaldo Flores, señalado en un negocio ilegal vinculado al cambio de divisas.
Cómo fue la detención de Alfredo Raúl Rosaspina
Durante la mañana del miércoles, personal de la Policía Contra el Narcotráfico (PCN) llegó hasta la casa de Rosaespina en la calle Olascoaga de la Ciudad de Mendoza, luego de que con ayuda de la Policía de Seguridad Aeroportuaria realizaran un análisis de información a través de escuchas telefónicas, en las que surgían los nombres de ambos detenidos como partícipes en actividades ilegales relacionadas al contrabando.
Walter Flores, un hombre de 58 años, tenía pedido de captura desde hace meses luego de un trabajo de investigación de Gendarmería, que lo vinculaba con la megacausa que busca desentrañar si el titular del Juzgado Federal 1 ha sido la cabeza de una asociación ilícita, señalada de cobrar coimas para aliviar la situación procesal y penal de algunos presos.
Flores fue durante años el dueño de una casa de cambio de monedas extranjeras, que operaba en el centro de la ciudad y hoy personal de PCN lo detuvo en su departamento ubicado en la calle España., durante el mismo operativo llevado a cabo en la casa de Rosaespina.
En el caso de este último, se trata de un hombre que trabajaba como despachante de aduanas y qué tiempo atrás había sido señalado por ayudarle a los camiones de transporte internacional, que cruzaban diariamente la frontera entre nuestra provincia y el país vecino, con el objetivo de facilitar el contrabando. A pesar de haber sido investigado por ello, las pruebas fueron insuficientes en aquel entonces para acusarlo.
No obstante, su nombre tomó notoriedad nuevamente entre las pesquisas luego de que Diego Aliaga lo señalara como parte de la organización que se supone que lideraba el juez Bento. Aliaga fue asesinado el 28 de julio de 2020, mientras era investigado como el presunto operador judicial y “mano derecha” del magistrado acusado.
A fines de mayo de 2021, Rosaespina llegó a los Tribunales tras ser investigado en una causa federal de contrabando, en la que reconoció haber intentado cruzar a Chile de manera ilegal más de 400 cartones de cigarrillos, que daban una suma millonaria.
Aquella investigación estuvo a cargo del juez Bento, quien determinó sentenciarlo a tres años de prisión en suspenso tras haber llegado a un arreglo con la fiscalía.
En los allanamientos realizados ayer en cada vivienda, los efectivos de Narcotráfico secuestraron artefactos tecnológicos para ser peritados, como computadoras, celulares y tablets. Así como también algunos pendrives y hasta una caja fuerte.