Páginas piratas de fútbol: cómo son los robos y estafas detrás de los “mil clicks”

Cientos de personas buscan en la web cómo mirar deportes sin pagar, pero detrás se esconde un puente a múltiples estafas virtuales.

Páginas piratas de fútbol: cómo son los robos y estafas detrás de los “mil clicks”
Ciberestafas detrás del "fútbol gratis".

La transmisión ilegal de partidos de fútbol en vivo en páginas piratas constituye una trampa de alto riesgo para los usuarios de internet, porque los hackers utilizan esos sitios como plataformas para concretar múltiples estafas virtuales.

¿Cómo hacen para acceder a billeteras virtuales, cuentas bancarias, datos de tarjetas de crédito, cuentas de mensajería instantánea, correos electrónicos e información familiar? En el momento de los “mil clicks”. Cada vez que un usuario quiere ingresar a una página pirata de deportes y comienza a cerrar las ventanas emergentes abre una puerta indeseada.

Cómo funciona el robo de datos

Antes de llegar a la pantalla deseada, el usuario tiene que sortear varios pasos haciendo una importante cantidad de “clicks”. En ese proceso, los sistemas informáticos de la piratería roban información sensible o acceden al control de teléfonos o computadoras.

Son delitos que se replican en todos los países con diferentes modus operandi, pero que siempre utilizan la posibilidad de ver “fútbol gratis” para atraer a los fanáticos más desprevenidos que desconocen la dimensión de las consecuencias.

Los hackers posicionan los sitios piratas con términos atractivos para ganar visibilidad en los buscadores de internet: “Fútbol gratis”, “Fútbol libre”, “Cómo ver el partido sin pagar”, son algunas de las consignas de cabecera de los grupos criminales.

“El único objetivo de los piratas es generar ingresos, sin importar cómo o a través de quién. Sus servicios ilegales resultan ser disparadores de otro tipo de delitos o un eslabón necesario para generar capilaridad de otros delitos vinculados con la disrupción de barreras de seguridad informática”, expresó Jorge Bacaloni, presidente de Alianza Contra la Piratería Audiovisual, asociación que lucha contra este delito en América Latina.

Bacaloni agregó que “todos los usuarios de sitios ilegales saben que para acceder a un contenido deben clickear varios botones virtuales antes de poder reproducir lo que desean”.

“En nuestra experiencia la cantidad oscila entre las 3 y 10 veces con motivo de un sistema comúnmente denominado ‘clickbait’ que implica dejar una carnada para inducir a los usuarios a clickear determinados comandos. En tales procesos los usuarios muchas veces activan archivos ejecutables que contienen malware e infectan sus equipos y abriendo acceso a toda su información personal a organizaciones criminales’, detalló.

Cuáles son las estafas detrás del “fútbol libre”

En países como Argentina, el Poder Judicial asumió acciones concretas contra todas las prácticas criminales detrás de los ciberataques. Alejandro Musso, fiscal de Cibercrimen en la Unidad Fiscal Especializada en la Investigación de Ciberdelitos (UFEIC) lidera esa cruzada y trabaja para exponer cuáles son las herramientas que utilizan los hackers para concretar el robo de datos y acceder a cuentas bancarias.

“Los riesgos para el usuario son diversos. Desde una estafa lisa y llana, dado que no existe un producto detrás de la oferta, hasta un producto deficiente. Y existen riesgos inherentes a la deficiencia del producto, entre ellos la posibilidad de descarga de virus informáticos de todo tipo. Sin darse cuenta, los usuarios pueden ser víctimas de virus espías o Malware troyanos orientados a la obtención de credenciales bancarias”, señaló Musso.

Seguido, advirtió sobre los casos más graves que incluyen el acceso a computadoras, celulares y otros dispositivos, y también a cuentas bancarias o billeteras digitales.

“La Fiscalía ha intervenido en diversos casos en los que aplicaciones de piratería digital son el conducto para ocultar vectores de ataque embebidos dentro del programa de descarga. Generalmente, son los denominados RAT (Remite Access Trojan) con los que se genera una puerta de acceso trasera o ‘Back Door’ del sistema y se logra tomar el comando y control de los dispositivos. Los ataques más comunes son de los malware GRANDOREIRO y MEKOTIO, conocidos troyanos bancarios dedicados a vaciar cuentas”, explicó el fiscal.