Un criadero ilegal fue desmantelado en la ciudad de Alta Gracia. En el lugar, se encontraban 41 perros en condiciones aberrantes. Tras los allanamientos, las mascotas quedaron al cuidado de proteccionistas pero, luego, el fiscal decidió que regresaran a su dueña original. Tras el repudio, el magistrado revocó la decisión.
Fue la Fundación Amigos del Mejor Amigo (Adma) quien rescató a 25 Bulldog Francés, 15 Pug y un Dachshund, del criadero llamado Anjali. Las mascotas estaban separados entre sí por un boyero eléctrico, y cada uno ocupaba un recinto muy pequeño.
Según los veterinarios que recibieron a los perros, la mayoría de ellos ingresaron “caquécticos (desnutridos) y deshidratados, con lesiones en la piel, oídos, boca, sistema digestivo, reproductivo, óseo articular y respiratorio”, según trascendió.
La decisión de la Justicia respecto a los animales rescatados
Si bien los animales quedaron bajo el cuidado de Adma, el fiscal a cargo de la causa, Diego Fernández, ordenó la restitución de los animales a su dueña original, donde se encontraban en condiciones de maltrato. Incluso después de que la mujer quedó imputada por maltrato animal.
En Alta Gracia, hubo un fuerte rechazo a la decisión. Por eso, las proteccionistas habían organizado una marcha silenciosa contra la resolución de la Justicia pero, este miércoles, el fiscal Fernández cambió su determinación y los perros continuarán al cuidado de Adma.
“Al final el fiscal decidió revocar la resolución y que la Fundación ADMA siga siendo depositaria judicial de los animalitos”, precisó Carolina Romagnoli, presidenta de la entidad de rescate a Vía Córdoba.
En tanto, precisó: “Los informes de los veterinarios que trabajan con la Fundación y el informe de los análisis realizados a los animales manifiestan una gran parasitosis. Algunos tiene puntos de cesáreas sobre cesáreas reiteradas, entre otras patologías y signos de maltrato”.
El estado de los animales rescatados
Romagnoli detalló que los animales están en hogares de transito; seis están en observación veterinaria y uno de ellos, de seis meses, tiene el humero quebrado y se encuentra internado en otra veterinaria. Los animales quedarán al cuidado de la fundación “hasta que la Justicia determine lo contrario”.
“La mujer que tenía estos animales para la venta hoy fue a la sede de ADMA a querer retirar los animales y se cruzó con voluntarios y demás proteccionistas. Es muy triste ver que una veterinaria (la dueña del lugar ejerce esta profesión) que debería cuidar y velar por la salud de los animales le propicie tanto maltrato”, concluyó.