En febrero de 2016, Leonardo Constantini (31) fue hallado muerto con al menos siete disparos en la cabeza en la ciudad de Arroyito, en el este de Córdoba.
Para el fiscal José Argüello, todo se orientaba a un "ajuste de cuentas narco", debido a que al parecer la víctima estaría supuestamente relacionada con la venta de drogas con conexiones en Córdoba capital y Santa Fe. "Se conoció que esta persona no tenía trabajo y era propietario de dos motos y un auto de alta gama sin poder determinar el origen de estos ingresos", indicó en su momento el fiscal.
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El asesinato conmovió a esa zona de Córdoba por la saña con la que se cometió.
Un mes después, la Policía atrapó a un sospechoso del crimen: Mariano Joel Sampó (25) fue imputado por el delito de homicidio calificado por alevosía, que contempla la prisión perpetua.
Este lunes 25 de setiembre, Sampó fue sentenciado en San Francisco a 13 años de prisión. ¿Cómo sucedió eso? Ocurre que, por pedido del abogado del imputado, y con acuerdo del fiscal Argüello, se accedió a un juicio abreviado en el que Sampó reconoció su culpa a cambio de que le redujeran la pena.
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Al parecer, el fiscal se habría inclinado por una condena de 17 años, en tanto que el abogado de Sampó solicitó 11 años. Finalmente, acordaron que fueran 13, a lo que el Tribunal accedió.
Durante el juicio quedó establecido "que la víctima se dedicaba a la comercialización de estupefacientes, al igual que el ahora condenado".
"El fiscal se refirió a una deuda de 10 mil pesos que el acusado mantenía con su víctima y aprovechando la amistad que había entre ambos logró que ese domingo lo acompañara en su motocicleta al Paraje Los Membrillos. Allí, el acusado, utilizando una pistola calibre 22, ultimó a Constantini de nueve disparos", precisó La Voz de San Justo.
Sampó ya fue trasladado a la cárcel de Bouwer.
