Ladrillitos, rompecabezas y hasta cajas vacías: para estas fiestas, los expertos recomiendan alejarse de los juegos electrónicos y volver a los juguetes tradicionales para disfrutar en familia, que estimulen la imaginación y la creatividad. Según informó Clarín, un reciente informe de la Asociación Americana de Pediatría (AAP), afirmó que cuanto más simple, mejor.
Aleeya Healey, autora principal del estudio, explica: "Los juguetes han evolucionado a lo largo de los años y los anuncios publicitarios pueden dejar a los padres con la impresión de que los juguetes con una plataforma 'virtual' o digital son más educativos". Y agrega: "La investigación nos dice que los mejores juguetes no tienen porqué ser llamativos o caros o venir con una aplicación".
De acuerdo a la APP, los juguetes no sólo tienen una función recreativa, sino que ayudan a desarrollar órganos como el cerebro, las interacciones con el lenguaje y la resolución de problemas, entre otros aspectos. Además, desde la institución, resaltan que son claves en cada una de las etapas que deben transitar los niños a lo largo de su infancia.
Según la asociación, existe un riesgo en el uso excesivo de medios electrónicos, ya que puede afectar al desarrollo verbal y lenguaje de los menores. Las últimas cifras indican que más del 90 por ciento de los niños de Estados Unidos accedieron a dispositivos móviles y, en su gran mayoría, comenzaron a tener contacto con ellos antes de cumplir el primer año. Así, los expertos recomiendan que los menores de dos años limiten el consumo de todo tipo de pantallas (televisión y computadora).
En esa línea, la APP, sugiere que los juguetes ideales van desde pelotas, rompecabezas, libros para colorear y hasta juegos de mesa. "Cuanto más sabemos sobre el desarrollo cerebral temprano, más comprendemos la necesidad de jugar, que se basa en la interacción humana", dice Healey en Clarín.