Una investigación policial de cinco meses terminó con la incautación de 36 kilos de cocaína, más de dos millones de pesos y miles de dólares y 15 personas detenidas, todo comenzó de casualidad. Fue gracias a la percepción de un efectivo que detectó una verdulería de Cipolletti que en realidad funcionaba como un kiosco de drogas.
Un oficial de la Policía de Río Negro, vestido de civil, ingresó al local a realizar una compra cuando observó un "pasamano" (venta a pequeña escala) de cocaína. El comerciante utilizaba su comercio como una "pantalla" para la venta de narcóticos. Esta situación desencadenó en varios allanamientos el domingo pasado en Allen, Huergo, Roca y Cipolleti.
La Policía desarticuló a tres bandas que operaban de forma independiente y que tenían un proveedor oriundo de la provincia de Salta, también se encuentra bajo arresto. Uno de los motivos que permitió identificarlos fue que la droga entregada contaba con un sello único en varios de los paquetes secuestrados. Por otra parte, la intervención telefónica a cada uno de los sospechosos permitió seguir sus movimientos.
Durante los operativos de detención, en Roca secuestraron 29 kilos de cocaína que estaban guardados en el ropero de una vivienda ubicada en la zona de Chacra Monte. La casa era usada como acopio de la mercadería y no se halló a ninguno de los sospechosos en ese lugar, desde esta mañana los efectivos provinciales llegaron al Juzgado Federal con 15 personas detenidas por el tráfico y venta de estupefacientes.
Por el momento, se espera que el Juez Federal, Hugo Greca lleve adelante las primeras diligencias del caso que ayer sacudió el ámbito policial en el Alto Valle. Según publicó Río Negro.
