Las abundantes precipitaciones registradas durante la mañana y el mediodía de ayer domingo en la provincia de Misiones generaron múltiples intervenciones de la Policía y de los cuerpos de bomberos, a raíz de anegamientos, caída de árboles y desbordes de arroyos en distintas localidades. Pese a la intensidad del fenómeno climático, las autoridades confirmaron que no se reportaron personas lesionadas ni fue necesario realizar evacuaciones.
Uno de los primeros episodios ocurrió en la ciudad de Leandro N. Alem, alrededor de las 9:30, cuando efectivos de la Unidad Regional VI acudieron a la intersección de la calle San Vicente y la avenida Las Heras, en el barrio Janssen. En el lugar, un árbol de gran porte cayó sobre la calzada y bloqueó por completo el tránsito vehicular. Con la colaboración de los Bomberos Voluntarios, se llevaron adelante las tareas de despeje que permitieron normalizar la circulación.
En la ciudad de Posadas, cerca de las 9:00, personal de la Unidad Regional X intervino en una vivienda ubicada sobre calle Malvinas al 6200, en el barrio Kennedy, que resultó inundada tras la intensa lluvia caída en un corto período. En el domicilio reside una mujer de 75 años que sufrió una descompensación vinculada a un cuadro de hipertensión, por lo que se solicitó asistencia médica. Asimismo, se realizaron tareas preventivas para resguardar a la vecina y sus pertenencias, con apoyo del cuerpo de bomberos.
Más tarde, alrededor de las 11:15, efectivos policiales de la jurisdicción de Santa Ana, junto a la División Bomberos, asistieron a vecinos del barrio Martín Chico luego del desborde del arroyo homónimo. La crecida ocasionó daños materiales en cercos perimetrales de dos viviendas y en un muro, aunque tras el relevamiento de la zona se descartaron riesgos adicionales. No se registraron heridos ni fue necesario efectuar rescates.


Finalmente, cerca de las 13:42, se constató el desborde del arroyo Garupá sobre un puente ubicado en un camino vecinal que conecta los parajes Tacuaruzú y Sol de Mayo, principal acceso a la comunidad aborigen Urunday-Tí. En ese sector no se reportaron viviendas afectadas por la anegación.
Las tareas de monitoreo y prevención continúan en las zonas comprometidas, con un trabajo coordinado entre la Policía de Misiones, los bomberos y las áreas municipales, ante la persistencia de condiciones climáticas inestables en la provincia.































