Lo que debía ser un viaje tranquilo desde Reino Unido hacia España terminó convirtiéndose en un verdadero escándalo. Un vuelo de easyJet que partió del aeropuerto de Luton con destino a Alicante se vio alterado cuando una pareja decidió encerrarse en el baño y mantener relaciones sexuales, a la vista y oído de decenas de pasajeros, incluidos menores.
El episodio ocurrió el viernes 8 de agosto y, según relataron testigos, la pareja había consumido gran cantidad de alcohol antes del incidente. La mujer, visiblemente alterada, exigió más bebida y, al no obtenerla, gritó que iba a “unirse al club de la milla de altura”, en referencia a la práctica sexual en aviones.
Gemidos, gritos y una cabina descontrolada
El ambiente empeoró cuando la mujer, que intentaba vomitar, corrió tambaleándose hacia el baño y pidió ayuda a su novio. Una vez juntos en el sanitario, comenzaron los ruidos fuertes, gruñidos y gemidos que alertaron a toda la cabina. Entre los pasajeros había familias con niños pequeños que quedaron expuestos a la escena.

El personal de easyJet trató de detener la situación sin éxito, por lo que dieron aviso al piloto. Al aterrizar en el aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández, la Policía Nacional esperaba a la pareja, que fue retirada del avión bajo la mirada de los pasajeros indignados.
Un vocero de la aerolínea confirmó el hecho y remarcó que la prioridad fue “garantizar la seguridad del vuelo y de los demás clientes”.
No es la primera vez que ocurren esta situación
El incidente reaviva la polémica sobre los comportamientos inapropiados en vuelos. El 3 de marzo, otra pareja fue detenida en un vuelo entre Tenerife y Gales tras ser descubierta masturbándose bajo los abrigos.
En ese caso, ambos recibieron condenas de trabajo comunitario y tuvieron que pagar indemnización a los testigos.