El presidente Alberto Fernández afirmó este jueves por la noche que “la paz social ha sido alterada” tras el atentado contra la vida de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
”Es necesario desterrar la violencia del discurso político y mediático”, dijo el Presidente en un mensaje en cadena y anunció un feriado nacional para este viernes “para que en paz y armonía el pueblo pueda expresarse en defensa de la vida y democracia”.
“En el día de hoy, poco después de las 21 horas, un hombre atentó contra la vida de la actual vicepresidenta de la Nación y dos veces presidenta constitucional, Cristina Fernández de Kirchner. Este hecho es de una enorme gravedad, es el más grave que ha sucedido desde que hemos recuperado nuestra democracia”, alertó.
El primer mandatario agregó que “un hombre apuntó con un arma de fuego a su cabeza y gatilló” y advirtió que “Cristina permanece con vida porque, por una razón todavía no confirmada técnicamente, el arma que contaba con cinco balas, no se disparó pese a haber sido gatillada”.
“Este atentado merece el más enérgico repudio de toda la sociedad argentina, de todos los sectores políticos y todos los hombres y las mujeres de la república, porque estos hechos afectan nuestra democracia. Estamos obligados a recuperar la convivencia democrática que se ha quebrado por el discurso del odio que se ha esparcido desde diferentes espacios políticos, judiciales y mediáticos de la sociedad argentina. Podemos disentir, podemos tener profundos desacuerdos, pero en una sociedad democrática los discursos que promueven el odio no pueden tener lugar porque engendran violencia y no hay ninguna posibilidad de que la violencia conviva con la democracia”, manifestó.
El Presidente, que leyó su discurso, subrayó que “estamos ante un hecho que tiene una gravedad institucional y humana extrema”. “Se ha atentado contra nuestra vicepresidenta y la paz social ha sido alterada. La Argentina no puede perder ni un minuto más. Ya no hay tiempo. Es necesario desterrar la violencia y el odio del discurso político y mediático y de nuestra vida en sociedad”, planteó.
Seguido, convocó “a todos y a cada uno de los argentinos y argentinas, a toda la dirigencia política y social, a los medios de comunicación y a la sociedad en general, a rechazar cualquier forma de violencia”.
“Necesitamos aislar, no convalidar y repudiar las palabras descalificadoras, estigmatizantes y ofensivas que solo nos dividen y enfrentan”, dijo.
El presidente Fernández reveló que se comunicó con la jueza que quedó a cargo del caso. “Le he solicitado que esclarezca rápidamente la responsabilidades y los hechos. También le he solicitado que asegure la vida del acusado directo que se encuentra detenido”, dijo.
“Que la conmoción, el horror y el repudio que este hecho nos genera se convierta en un compromiso permanente para erradicar el odio y la violencia de la vida en democracia”, apeló.
Por ello, el primer mandatario informó que decidió declarar feriado nacional para este viernes, para que “el pueblo argentino pueda expresarse en defensa de la vida, de la democracia y en solidaridad con nuestra vicepresidenta”.
“El pueblo argentino quiere vivir en democracia y en paz y nuestro gobierno tiene el firme compromiso de trabajar cada día para que lo logremos”, dijo para cerrar su breve mensaje.