Maximiliano Eduardo Roth es un joven de 23 años que tiene un macabro prontuario: fue condenado por castigar a una nena de 2 años, hija de una expareja, y gracias al beneficio de “libertad asistida” que le dio un juez volvió a atacar. Esta vez, le fracturó el cráneo al bebé de su nueva pareja.

Onildo “Yiyo” Stemphelet, juez de Ejecución Penal N° 2 de Bahía Blanca, le concedió la libertad asistida al considerar que tuvo en la cárcel una “conducta ejemplar 10”.
Roth fue excarcelado y fijó como domicilio una casa de la calle Independencia al 700, en la ciudad de Coronel Suárez. Allí vivía con su nueva pareja, una chica de 19 años, y los dos hijos de esta.
El acusado era violento con la mujer y también con el menor. A ella no la dejaba salir ni al patio y le revisaba permanentemente el celular. La víctima pudo denunciarlo en la Comisaría de la Mujer, un día que pudo salir para llevar a su hija de 3 años al jardín.
Mientras la mujer presentaba hematomas en el rostro, el cuello y los brazos, el bebé de 11 meses fue trasladado al Hospital Penna, de Bahía Blanca, donde se le diagnosticó fractura de cráneo. Lo pasaron de terapia intensiva a intermedia y, afortundamente, este jueves ya se encontraba “fuera de peligro”.
La fiscal Claudia Lorenzo, de la UFIJ N° 15 del Departamento Judicial Bahía Blanca, pidió su detención por “tentativa de homicidio”.
El antecedente que lo llevó a prisión
Según consigna La Brújula 24, el acusado había sido condenado a tres años y un mes de cárcel por “lesiones graves y leves”, en esa oportunidad por golpear a una nena de 2 años (hija de una anterior pareja). Esa pequeña también terminó en el hospital con fractura de cráneo, entre otras heridas, como por ejemplo, mordeduras.
La explicación de Roth entonces fue que la nena “se había caído”, pero las pericias médicas determinaron que mentía.
Cuál era las condiciones insólitas que le impuso el juez a Roth
El polémico juez Stemphelet, en su resolución de “libertad asistida” le ordenó cumplir una serie de requisitos al menos cuestionables:
- Abstenerse de consumir sustancias estupefacientes y de abusar de bebidas alcohólicas.
- Someterse al control y cuidado del Patronato de Liberados correspondiente.
- Realizar tratamiento psicológico.
- Concurrir al curso denominado “deconstruyendo masculinidades”.
Cabe mencionar que, además de ser un maltratador de niños, Roth cuenta con varias denuncias por violencia de género. Incluso despues de concurrir al curso impuesto por el juez.