Horror en Burzaco. Dos sospechosos menores de edad fueron detenidos este sábado por el homicidio de Aylén Valdez, la joven de 24 años asesinada el pasado lunes al proteger a su hijo de dos años durante una balacera.
La joven fue ultimada a balazos frente a dus pequeño hijo, en el partido bonaerense de Almirante Brown, y su pareja resultó gravemente herida. Los investigadores analizan un posible ajuste de cuentas vinculado al narcotráfico, aunque no descartan otros móviles.

Según fuentes policiales, la pareja llegó en un Citroën C4 blanco junto al pequeño cuando fueron sorprendidos por al menos dos agresores que abrieron fuego a quemarropa.
LOS DETENIDOS POR EL ASESINATO
Los detenidos por el brutal crimen son un joven de 19 años, conocido como “Pachorra”, y un adolescente de 16 años. Ambos fueron identificados y localizados tras una intensa búsqueda encabezada por la DDI de Lomas de Zamora, a partir del análisis de cámaras de seguridad y testimonios de vecinos de la zona.
El mayor de los sospechosos fue apresado en una vivienda a cuatro cuadras del lugar del ataque. El menor fue capturado en su domicilio de la calle Morel, a siete cuadras. En uno de los allanamientos, la policía secuestró una pistola calibre 9 milímetros.

Testigos aseguraron que los agresores dispararon desde ambos lados del auto y escaparon rápidamente.
Las cámaras de seguridad captaron a dos sospechosos merodeando minutos antes del crimen: uno llevaba una mochila y otro circulaba en bicicleta.
LA HIPÓTESIS DE UN AJUSTE NARCO
La principal línea investigativa apunta a un ajuste de cuentas vinculado al narcomenudeo. De acuerdo con los testimonios recolectados, la pareja de Aylén, vendía cocaína al menudeo en el barrio Arzeno de Burzaco y trabajaba para un proveedor de la zona.
Los investigadores sostienen que los atacantes lo habrían citado con el pretexto de “arreglar una deuda”, pero el objetivo habría sido ejecutarlo. Aylén Valdez, ajena a ese entorno, quedó en medio de la balacera.

Otra línea de la causa menciona a un presunto narco conocido como “Marvin”, que operaría en Llavallol, Burzaco y Barrio Lindo, como posible instigador del ataque, aunque hasta el momento no hay pruebas concretas que lo vinculen directamente.
El avance de la causa busca ahora determinar responsabilidades y esclarecer el rol de posibles autores intelectuales del crimen.































