Crimen de Fernando Báez Sosa: ¿puede cambiar la situación de los rugbiers tras conocerse el informe del hospital?

Este martes se conoció un documento del Hospital Illia que recibió al joven tras el brutal ataque a la salida del boliche Le Brique en Villa Gesell.

Crimen de Fernando Báez Sosa: ¿puede cambiar la situación de los rugbiers tras conocerse el informe del hospital?
El crimen de Fernando Báez Sosa: las condenas a los acusados y los argumentos del Tribunal.

El crimen de Fernando Báez Sosa sigue dando a conocer detalles de lo que fue en la fatal noche del 18 de enero de 2020 en Villa Gesell. Ese día, ocho rugbiers mataron a golpes al joven de 18 años a la salida del boliche Le Brique en lo que fue un hecho que quedó para siempre en la memoria de los argentinos.

Ahora, a más de tres años del asesinato y conocida la condena a prisión perpetua para Máximo Thomsen (23), Ciro Pertossi (22), Luciano Pertossi (21), Enzo Comelli (22) y Matías Benicelli (23) y los 15 años para Ayrton Viollaz (23), Blas Cinalli (21) y Lucas Pertossi (23), se filtró el informe del hospital que atendió al cuerpo sin vida de Báez Sosa.

El juicio de Fernando Báez Sosa duró un mes y generó todo tipo de polémicas. Hoy, los rugbiers esperan por conocer dónde pasarán el resto de su condena.
El juicio de Fernando Báez Sosa duró un mes y generó todo tipo de polémicas. Hoy, los rugbiers esperan por conocer dónde pasarán el resto de su condena.

Todo se dio después de que las defensas tanto de la familia como de los rugbiers se presentaran en la Cámara de Casación de Dolores. Por un lado, Burlando busca que se confirme la prisión perpetua para los ocho condenados, mientras que Hugo Tomei buscará que reducir lo dictado por el Tribunal de Dolores.

El informe que ahora salió a la luz es del hospital municipal Arturo Illia de Villa Gesell, donde el cuerpo de Fernando llegó al shock room después del brutal ataque. Justamente, el documento fue presentado por Tomei ante la Cámara de Casación donde da algunos detalles que la defensa busca integrar en el proceso.

El documento que reveló Infobae cuenta con un estudio de sangre, un electrocardiograma, una serie de tomografías computarizadas de cráneo, cuello, tórax, abdomen y pelvis. Justamente, la zona de la cabeza fue clave en el juicio porque se tomó que allí fue el golpe mortal que terminó con la vida de Báez Sosa.

Allí, se conoció que en el análisis, se halló una “imagen espontáneamente hiperdensa rellenando los surcos corticales, valles silviano, cisternas peritroncales, ventrículos laterales y centrales extendiéndose a conducto ependimario y espacio epidural”.

Además, remarcaron que existía una “hemorragia subaracnoidea bilateral que ocupa todas las cavidades ependimarias, sin evidencias de lesiones óseas de origen traumático”. En el tórax había “signos claros de aspiración de fluidos y signos de ahogamiento con ocupación de la tráquea, bronquios principales, lobares y segmentarios, así como de las estructuras alveolares parahiliares”.

Básicamente, lo que tuvo Fernando fue una hemorragia masiva lo que provocó que sea imposible salvarle la vida. El detalle está en que no sufrió una fractura de cráneo, por lo que es un detalle que la defensa se intentará agarrar para buscar algún cambio en el dictamen de la Justicia.

El informe médico del Hospital Illia que atendió a Fernando Báez Sosa en Villa Gesell la noche del ataque.
El informe médico del Hospital Illia que atendió a Fernando Báez Sosa en Villa Gesell la noche del ataque.

En diálogo con TN, el abogado de la familia, Fernando Burlando, señaló que “no modifica nada desde el punto de vista de la opinión futura de la Justicia”. El foco está puesto en que el electrocardiograma, el cual señala que el corazón de Fernando estuvo latiendo hasta cerca de las 6 de la mañana y esto indica que murió cerca del hospital.

“Son situaciones que ya se conocían, de hecho el Tribunal Oral de Dolores no hizo lugar a un pedido de quien les habla, de incorporar el testimonio de la doctora Romero y las historias clínicas. Lo que quedó claro durante el proceso y durante el juicio es que pierde la vida a las 6.05″, señaló el letrado.

La búsqueda de la defensa de los rugbiers es desestimar el testimonio de la emergentóloga Carolina Giribaldi Larrosa, personal del hospital Illia, que declaró en el juicio contra los acusados. Se trató de la médica que llegó al lugar del hecho y constató que Báez Sosa “no presentaba signos vitales”.

Además, agregó que las heridas en la cabeza de Fernando provocaron una hemorragia cerebral masiva donde no tenía chance de sobrevivir. “El tronco encefálico es fundamental. El paro cardíaco es irreversible: se puede estimular el corazón manualmente, pero no tiene estímulo propio”, concluyó ante el Tribunal.

Cómo es la situación de los rugbiers que mataron a Fernando Báez Sosa

Desde el pasado 6 de febrero, que Máximo Thomsen, Enzo Comelli, Matías Benicelli, Ciro y Luciano Pertossi, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi permanecen en la penitenciaría de Melchor Romero a la espera de ver qué pasará con su situación y del traslado a un penal de máxima seguridad, donde se manejan varias opciones.

Una de las posibilidades que había pedido la familia es que sean trasladados al Penal de Campana, que está a pocos kilómetros de Zárate y que facilitaría la logística. Sin embargo, también se sumó el Penal de Sierra Chica y en las últimas horas apareció el Penal de General Alvear.

La empresa Centro Construcciones terminó la obra de la Unidad Penal 57 el 12 febrero de 2019 y lo inauguró María Eugenia Vidal (Federico López Claro)
La empresa Centro Construcciones terminó la obra de la Unidad Penal 57 el 12 febrero de 2019 y lo inauguró María Eugenia Vidal (Federico López Claro)

En primer lugar, el Penal de Campana cuenta con la ventaja de lo mencionado anteriormente, pero la situación más clara es que los ocho podrían ser separados. En ese sentido, los tres que tienen condenas de 15 años podrían ir a esa Unidad, mientras que los otros cinco deberían trasladarse a un penal de máxima seguridad.

La unidad ubicada en el noroeste de la provincia de Buenos Aires en un predio donde conviven la Unidad Penitenciaria (UP) 21, 41 y la 57. A pesar de la cercanía, ninguno de los presos de una unidad puede moverse -salvo traslado oficial- de una a otra.

De acuerdo a los datos que relevan desde la Comisión por la Memoria, en “La 57″, como se la conoce en la jerga carcelaria, tiene el cupo de 576 unidades para la cantidad de presos. Sin embargo, actualmente están un 4% arriba de la población límite y se encuentran con 598 cupos.

Es decir, sería una locación más que complicada primero para albergar a los ocho detenidos juntos y, sobre todo, mantenerlos separados del resto de la población carcelaria como ocurre en Melchor Romero.

El penal de Sierra Chica puede ser una de las cárceles que reciban a los rugbiers.
El penal de Sierra Chica puede ser una de las cárceles que reciban a los rugbiers.

La situación de Sirrea Chica es aun más compleja. La Unidad Penal 38 que está cerca de la localidad de Olavarría, tiene una población habilitada de 384 personas, pero actualmente en ese lugar hay hospedados 927 presos haciendo que haya una sobrepoblación del 141%. Otra vez, mucho menos espacio para los beneficios actuales de los rugbiers.

En tercer lugar, se empezó a hablar de la posibilidad de que sean trasladados al Penal de General Alvear, ubicado a 240 km al oeste de la Ciudad de Buenos Aires. En esa unidad carcelaria estaban alojados los hermanos Martín y Cristian Lanatta, y Víctor Schillaci, los condenados por el triple crimen de General Rodríguez.

Cabe recordar que los tres tuvieron una increíble fuga el 27 de diciembre de 2015, donde estuvieron prófugos durante 15 días, donde realizaron robos, tiroteos y persecuciones entre la provincia de Buenos Aires y Santa Fe.

Actualmente, esta unidad que está a pocos kilómetros de la ruta provincial 61, tiene una sobrepoblación del 152% con un total de 2.657 presos en un predio que tiene lugar para 1.053 personas en total.