Fabián Améndola, tras la sentencia: “Tal vez por piedad no terminaron de alcanzar el grado de justicia que se requería”

El abogado que integra el equipo de Fernando Burlando habló en exclusiva con este medio después de conocer el fallo del Tribunal de Dolores. Confirmó que apelarán el fallo en Casación y habló sobre la familia de la víctima: “Buscaremos de ayudarlos a encontrar la forma de canalizar ese dolor”.

Fabián Améndola habló después de la lectura de la sentencia contra los ocho rugbiers que mataron a Fernando Báez Sosa.
Fabián Améndola habló después de la lectura de la sentencia contra los ocho rugbiers que mataron a Fernando Báez Sosa. Foto: Web

Fabián Améndola, uno de los abogados de la familia Báez Sosa, advirtió este lunes la sentencia del Tribunal Criminal Oral de Dolores “se queda a mitad de camino” y evaluó que los jueces, “tal vez por piedad, no terminaron de alcanzar el grado de justicia que se requería”.

Améndola así lo manifestó en una entrevista exclusiva con este medio, poco después de conocer la definición del mencionado tribunal en la causa por el crimen de Fernando Báez Sosa: condena perpetua para Máximo Thomsen, Ciro Pertossi, Luciano Pertossi, Enzo Comelli y Matías Benicelli, por ser coautores del crimen, y 15 años para Ayrton Viollaz, Blas Cinalli y Lucas Pertossi, por ser partícipes secundarios.

Améndola integró el equipo que lideró Fernando Burlando, en representación de Graciela y Silvino Báez Sosa, los papás del chico asesinado en Villa Gesell.

Los rugbiers acusados del crimen de Fernando Báez Sosa en el día de la sentencia (Foto: Clarín)
Los rugbiers acusados del crimen de Fernando Báez Sosa en el día de la sentencia (Foto: Clarín)

- ¿Qué opina sobre la sentencia dictada por el Tribunal de Dolores?

- Me parece que es una sentencia que se queda a mitad de camino, que no termina por resolver con justicia la situación. Fundamentalmente, porque tuvo por acreditado el hecho, tuvo por acreditado el homicidio doblemente calificado por el concurso premeditado y por alevosía. Se queda en una participación secundaria para tres de los responsables. Ahora obviamente vamos a leer atentamente los fundamentos y así podremos hacer un análisis más profundo. Pero nosotros que conocemos la causa conocemos cuáles son las pruebas que se ventilaron en el juicio, obviamente disentimos con que esa participación sea secundaria. Lo máximo que entendíamos que podía pasar era que se vuelva a una participación primaria como venían siendo acusados desde la instrucción, lo cual no ha ocurrido y, bueno, nos obliga a ir al Tribunal de Casación a buscar que se repare en esta cuestión.

- ¿En qué va a quedar el futuro de esta causa?

- Para mí se va a confirmar la condena a prisión perpetua de los cinco que la recibieron y se va a elevar al grado de partícipe necesario los tres que recibieron una pena menor y también se les va a imponer una prisión perpetua.

Los papás de Fernando Báez Sosa deberán "encontrarle un sentido a la vida", según Améndola.
Los papás de Fernando Báez Sosa deberán "encontrarle un sentido a la vida", según Améndola.

- ¿Cómo se encuentra la familia de Fernando después del fallo del Tribunal?

- Ahora muy conmocionada porque, independientemente de esto que estamos hablando, estas diferencias que hay el fallo, realmente se condenó a los ocho imputados, no hay ninguno de ellos que haya sido absuelto. El fallo también confirmó que fue un homicidio doblemente agravado, así que, desde ese punto de vista, la familia lo recibe con cierta conformidad, aunque tal vez por piedad no hayan terminado de alcanzar el grado de justicia que se requería.

- ¿Qué papel les queda por cumplir ahora con la familia de Fernando?

- Desde lo técnico seguir asistiéndola en la etapa recursiva para hasta que el fallo sea un fallo que adquiera firmeza, que no haya más instancias a las que ir. Mientras eso va ocurriendo, también ayudar a que encuentren un sentido a la vida porque muchas veces han manifestado que a partir de la muerte de Fernando la vida ya no tenía más sentido para ellos. Bueno, buscaremos de ayudarlos a encontrar la forma de canalizar ese dolor y ayudarlos a alivianar el dolor, que no se va a ir nunca, para que puedan seguir viviendo.