La naturaleza no para de sorprendernos. Los guardaparques del Parque Nacional Lanín se llevaron un gran asombro al ver el felino más pequeño de América y uno de los más chicos del mundo a través del registro de cámaras instaladas en el bosque.
“En el marco del trabajo de conservación que se lleva adelante dentro de la zona sur del Parque Nacional Lanín se realizó un extraordinario registro de un Gato Huiña Melánico. A partir de un monitoreo con cámaras trampa, se registró la presencia de un ejemplar de este felino, que habita principalmente en las zonas con bosque húmedo y es muy difícil de observar”, detallaron desde el área de prensa del parque a LMNeuquén.
El guardaparque, Patricio Garrido, fue quien instaló las cámaras trampa en diversas zonas del bosque para lograr examinar, de manera no invasiva, la presencia de distintas especies de animales, como aves nativos, pumas, zorros y pumas.
Cómo es el felino más pequeño de América
El animal que lograron fotografiar se trata de un felino que pesa entre 2 a 3 kilos y mide entre 39 a 48 centímetros de largo, más 20 a 25 centímetros de cola. Según señalaron, tiene un pelaje espeso y aireado, de un color bayo rojizo de fondo con manchas oscuras, chicas y numerosas que se dispersan de forma compacta en todo el cuerpo.
Con respecto a su cara, tiene ojos pardos y una nariz oscura, que lo diferencia fácilmente del gato montés: “El Gato Huiña es, además, una especie muy importante para la salud pública ya que se alimenta principalmente de roedores, incluyendo al ratón de cola larga (Oligoryzomys longicaudatus), que es el portador del virus HANTA”, detallaron.
Según el blog La Era Gatera, esta especie es la más amenazada en Sudamérica, debido a que los bosques en los que habita se encuentran en peligro de deforestación. Las principales amenazas son la fragmentación del hábitat y las atropellas, la depredación por perros salvajes y la caza ilegal.
El misterio del Gato Huiña
El animal habita en los bosques de Chile y el oeste de Argentina, y se alimenta de aves y de pequeños mamíferos, como ratones y comadrejas. Sin embargo, al ser un felino discreto y tímido, muy poco se conocía de esta especie.
Un fotógrafo de National Geographic, Joel Sartore, desde 2006 que lleva a cabo un proyecto para poder descubrir algo más distintivo del gato: reveló que su maullido suena más parecido al canto de un pájaro que a un felino. Gracias a las fotos de Sartore, se consiguió la primera grabación conocida del animal.