Rubén Guillot (38) fue condenado a 11 años de prisión por un abuso sexual cometido en abril del años pasado. La víctima es una menor de edad, que al momento del ataque tenía 14 años y fue agredida adentro de un zanjón a plena luz del día.
La víctima se bajó del colectivo a las 16:30 en la calle Las Cañas, de Guaymallén, y fue sorprendida por el agresor por la espalda, quién la arrojó al zanjón y la violó amenazándola con un revólver.
En mayo del año pasado, Guillot se entregó en una comisaría de Río Ceballos, Córdoba, tras haber estado prófugo más de tres semanas en distintas provincias. Ya sabía que la policía lo estaba buscando, pues su casa había sido allanada por orden del fiscal Tomás Guevara.
El fiscal, días después del abuso, consiguió un video de la cámara del micro en que viajaba la chica y allí pudo ver a Guillot que se bajaba en la misma parada que la víctima. Luego el fiscal solicitó información a la la empresa expendedora de tarjetas y lograron establecer que los dos se habían subido en la misma parada y se bajaron en el mismo lugar.
Cruzando datos de las tarjetas de ambos, llegamos a la conclusión de que el agresor la había seguido desde que se tomó el micro enGodoy Cruz, es decir, viajaron juntos en dos colectivos. Los días posteriores al abuso la Red Bus se siguió usando. Fue así que se hizo una triangulación de los lugares donde le cargaban saldo y de las líneas de colectivos en las que se la usaba, informa diario Los Andes.