Quedó detenido Jonathan Morales, el principal sospechoso del asesinato de Sebastián Prado, el joven de 36 años que fue ultimado de un disparo en la Sexta Sección en septiembre del 2013 cuando se resistió al robo de su camioneta porque estaban sus hijos adentro.
Morales ya había estado detenido por esta causa pero había quedado en libertad luego de que su jefe declarara que había estado trabajando a la hora del crimen de Prado.
Sin embargo, el testimonio que realizó Lucas Orozco, otro delincuente, en las últimas horas y por otra causa lo vinculó directamente al asesinato de Prado.
Orozco y su novia quedaron detenidos por la muerte de Federico Álvarez (70), quien murió baleado en su casa de Colonia Molina, Guaymallén, en enero de este año.
Este último delincuente se adjudicó el crimen de Álvarez para que su pareja quedara en libertad. Pero, en su declaración también dijo que el "Johnny" Morales le había aconsejado que si su víctima (y ex patrón) lo reconocía, debía matarlo. En ese contexto, le contó que hace cuatro años "él había matado a un médico" pero que "el patrón lo había hecho zafar".
Diego Becerra, uno de los dueños del local La Linda (ubicado sobre calle Colón de Ciudad), donde trabajaba Morales declaró: "El negocio estaba abierto. Mientras atendíamos a los clientes, vimos por el noticiero la noticia del homicidio del médico. En ese momento estábamos comiendo unas papas revueltas que él nos había preparado". Este testimonio desligó a Morales del crimen.
A continuación el video de cuando Morales recuperó la libertad en 2013 tras la declaración de su patrón.
