El domingo fue asesinado Joaquín Nano Roldán, el joven de 15 años que fue baleado durante un enfrentamiento en una fiesta clandestina en Guaymallén. Uno de los presuntos autores se burló en las redes y este lunes decenas de adolescentes pretendieron vengar la muerte de su amigo.
En el interior del barrio Gomensoro, de donde son oriundos los sospechosos de matar al menor, amigos de la víctima fueron en busca de venganza pero la intervención policial originó que el accionar de la barriada terminara en una masacre.
La bronca no sólo fue provocada por el asesinato, sino también por las burlas posteriores de los familiares y conocidos de los presuntos autores del crimen, a través de mensajes de Whatsapp que fueron revelados por El Sol.
La idea de los jovenes autoconvocados tenían en claro encontrar a uno de los sospechados del asesinato, lincharlo y hacer justicia por mano propia, según indicaron vecinos de la zona.
Audios que trascendieron a través de conocidos de los sospechosos detallaban que estos fueron a sus domicilios a buscar pertenencias y huyeron de la zona hacia otro departamento del Gran Mendoza, ante la inminente posibilidad de que terminaran detenidos si permanecían allí.