Por primera vez en la historia, los prestigiosos Premios Gardel eligieron un escenario para su celebración fuera de la Ciudad de Buenos Aires. La provincia elegida fue Mendoza y el gobernador Alfredo Cornejo y el intendente anfitrión, Rodolfo Suárez, celebraron la federalización del evento.
Cornejo celebró la decisión de los organizadores de la premiación de elegir a Mendoza para llevar "por primera vez los premios fuera de la calle Corrientes".
“Las calles de la Ciudad de Mendoza están llenas de gente que sigue a sus artistas, y esto es muy bueno para la provincia, para la cultura, para el turismo y la gastronomía”, dijo Cornejo.
Más música y turismo
La capacidad hotelera instalada en Mendoza sin dudas fue decisiva para que todo el mundo artístico musical de la Argentina se traslade a la provincia para vivir una fiesta de las dimensiones de los Premios Gardel.
Guillermo Castellani, presidente de CAPIF, dijo que "el viaje federal de los Gardel empieza por Mendoza y es una magnífica decisión, por todo lo que significa esta provincia para el país, especialmente por el apoyo que le dan a los artistas, desde la Fiesta de la Vendimia hasta todas las rutas turísticas que incluyen música".
Por su parte, el intendente de Capital, Rodolfo Suarez, se mostró "muy satisfecho por la llegada de este evento para el que la Ciudad de Mendoza está perfectamente preparada y con todo lo necesario para que sea un éxito".