Las primeras proyecciones de inflación del sector privado estiman que la inflación de marzo podría ubicarse en la misma zona que la de febrero, lo cual justifica la preocupación del Gobierno para generar medidas que sostengan la desaceleración.
Las complicaciones en el flanco político con el rechazo del DNU 70 en el Senado y las complejas negociaciones con gobernadores y diputados, llevan al Gobierno a buscar en la economía señales para sumar algún tipo de rédito.
El freno a la inflación fue una herramienta pero cuando arrancó marzo aparecieron señales que obligaron al Palacio de Hacienda a activar acciones políticas para que no se aborte la caída de la inflación.
La inquietud que se palpó en el Palacio de Hacienda se transformó en una realidad con los cortes de las consultoras privadas referidos a la primera quincena de marzo.
Qué dicen las proyecciones privadas
En su informe sobre la evolución de precios de los alimentos de la primera semana del mes, la consultora LCG informó un aumento de 3,6%, con una aceleración de 2,3 puntos respecto al período anterior. En la sumatoria de las cuatro semanas previas el alza llegó al 12%.
En distintas entrevistas, el presidente Javier Milei advirtió que este es un comportamiento lógico en todos los arranques de mes.
El trabajo de la misma empresa para la segunda semana mostró un incremento de los alimentos de 3,3%, apenas 0,3 puntos por debajo de la primera. Por tanto, la inflación acumulada trepó al 6,9%.
En parecida línea, la consultora EcoGo señaló que “en la segunda semana del mes, los alimentos registraron un incremento del 2,8%, marcando una desaceleración de 0,3 puntos respecto a la semana previa”.
“Con este dato y considerando aumentos proyectados para las dos semanas restantes del 3%, la inflación en alimentos consumidos dentro del hogar ascendería a 12,2% en marzo. Si además se incorporan los aumentos registrados en alimentos consumidos fuera del hogar, la inflación en alimentos alcanzaría el 11,7%”, añadió.
Con estos datos, EcoGo redujo a 13,2% la proyección mensual de marzo. “La baja respecto de nuestra proyección inicial responde a la postergación, por parte del Gobierno, de los aumentos previstos para las tarifas de gas este mes. A esto se suma además una proyección en alimentos levemente menor a la esperada”, indicó en su informe.
Ante la consulta de este medio, Lautaro Moschet, economista de la Fundación Libertad y Progreso, señaló que “en las primeras dos semanas de marzo, la inflación acumulada está por debajo del 7%”.
“Esperamos que la inflación continúe su camino descendente y se ubique por debajo del 13,2% del último mes, pudiendo alcanzarse incluso a perforar el 12%”, evaluó el economista.
Por su parte, la consultora de C&T informó hoy que su evaluación de la primera quincena del mes permite inferir que el mes cerrará con un incremento del costo de vida de 13%.
Medidas de Gobierno
Las cifras que manejan las empresas privadas le dan asidero a las diferentes medidas que tomó en las últimas horas el Gobierno nacional para amortiguar la suba de los precios.
Sin dudas la más significativa es la postergación de los aumentos de las tarifas de gas y transporte en el AMBA.
Los números preliminares demuestran que si se hubiesen aplicado la inflación de marzo saltaría claramente por encima del 13,2% que dio el mes pasado.
“La baja de la inflación tiene que ser consecuencia del ancla fiscal y conducente a la salida del cepo. Atrasar aumentos de tarifas para mejorar datos inflación de corto plazo es contradictorio y cortoplacista. Esperemos sea un lapsus transitorio”, evaluó el economista, Gabriel Caamaño en sus redes sociales.
La llegada de los importados
Que la “escalerita sea descendente” es fundamental para las aspiraciones del Ministerio de Economía dado que uno de los primeros objetivos de este proceso es aplacar las expectativas de inflación futura.
El plan de Caputo de frenar los precios con la competencia de importados ya cosechó reacciones en contra de la Unión Industrial Argentina (UIA) y en las últimas horas se sumó la Cámara Argentina de la Pequeña y Mediana Empresa (CAME), entidad que le pidió una reunión al ministro para tratar el tema.
Tras recibir a los gobernadores patagónicos en la sede de la entidad, el presidente, Alfredo González, señaló: “Todavía tenemos demasiados pies encima como para poder competir mano a mano”.
Los industriales piden que existan reglas de juego parejas para encarar esa competencia y hacen foco en la carga impositiva que aún soporta la producción argentina.
En tanto, los datos de consumo también le dan intensidad a las luces de alerta. Un informe de la consultora Scantech reveló que en febrero las ventas en supermercados se hundieron más de 13%.