El gobierno anunció la inflación de abril y el rubro que encabeza el aumento de precios es Prendas de vestir y calzado con un 9,9% con respecto al mes anterior.
Sin embargo, la cifra anul de ese crecimiento asusta más: un 70%.
“No lo esperábamos”, dicen en la industria, mientras intentan explicar los motivos que están detrás de estos incrementos.
Mientras tanto, el presidente Alberto Fernández declaró: “Uno los protege y cuida, pero después eso se vuelve en contra de la gente. Hay un desmadre de los precios entre el que confecciona y el que vende”.
El presidente de la Fundación Pro Tejer, Luciano Galfione, explica los motivos: “Claramente tenemos un problema, pero ese problema está en la situación estructural que tiene la Argentina y es transversal a todos los sectores. Me cansé de defenderme. Explico las razones”.
“¿Los precios de la ropa son caros? No, los sueldos son bajos. No puede ser que hoy una persona que trabaja sea pobre. Nosotros somos eficientes hasta la puerta de la fábrica, pero somos víctimas como todos los que producen algo en este país”, explicó.
Por su parte, la economista y directora ejecutiva de Pro Tejer, Priscila Makari, explicó sobre las cifras del INDEC que “el organismo estadístico hoy usa, para la ponderación, lo que las familias consumían en 2004. Si bien la inflación en el rubro es menor en mercados como los locales de Flores o Avellaneda, pondera mucho más en el índice el consumo en shoppings, cuando hoy se compra mucho más en comercios de barrio o en esas zonas, además de las plataformas online”.
“Nos influye mucho que se tomen los shoppings como representación del consumo de la gente”, planteó Galfione. La indumentaria pondera cerca del 8% en el IPC del Indec.
Ambos explican que con la invasión de Rusia a Ucrania, la incidencia de los aumentos en el primer eslabón de la cadena tiene muy bajo impacto en el precio final de la prenda.
Lo que realmente influye son los altos valores de los alquileres, los impuestos y los gastos de comercialización y marketing.
Según ellos, la industria incide en apenas el 8,5% del valor de una prenda.