Brasil está en cuartos. Fue tan superior a Corea del Sur que se fue al entretiempo ganando por 4 a 0. Pero hubo algo en el tercer gol que llamó la atención del mundo entero y nada tuvo que ver con la calidad de la jugada sino con el festejo: el baile de Tite.
El tercer tanto estuvo en los pies de Richarlison, que tras un rebote, hizo jueguitos con la cabeza, se la dio a Marquinhos que abrió para Thiago Silva y este volvió a rebotar para el delantero del Tottenham marcando el 3-0 parcial. “Los 9 estamos para hacer goles”, declaró la estrella brasileña después.
La alegría y la tranquilidad que siempre da ganar con tanta autoridad de entrada fue tal que Tite, el entrenador de la Selección verdeamarela no se resistió a participar de un alocado festejo.
Fue él mismo quien habló con Dani Alves y en cuestión de segundos se armó una rueda con los jugadores, se acercaron algunos de los titulares -por supuesto, Richarlison- y todos juntos hicieron una especie de baile “stone” con los brazos en jarra y moviendo la cabeza como gallinas.
Todo parece indicar que el festejo ya estaba preparado y con el típico ritmo que los vecinos llevan en las venas, a pesar de la seriedad que lo caracteriza, el entrenador mostró sus cualidades. Por lo visto, al show de Brasil no le faltó nada.