Con el juego un poco trabado y una leve superioridad de Croacia en cuanto a posesión de la pelota, hubo una imagen que puso nerviosos a todos: algo le pasaba a la pierna izquierda de Lionel Messi. Con el correr de los minutos, la semifinal cambió para bien pero quedó en el aire la incógnita sobre el estado físico del mejor jugador del mundo.
Messi se tocaba la parte trasera de la pierna izquierda, se hundía los dedos como queriendo aflojar una tensión. El banco también lo notó, él miró a Lionel Scaloni y levantó el pulgar. Iba a seguir jugando. Y vaya si iba a seguir jugando.
Si bien no hubo necesidad de que lo viera -al menos en el campo- ningún integrante del cuerpo médico, la preocupación estaba. Cuando a los 34 minutos del primer tiempo cobraron penal para Argentina no hubo dolor alguno que se interponga entre el 10 y la pelota. El marcador cambió a favor de la Argentina y el capitán llevaba tranquilidad a todos.
No obstante, antes de que terminara la primera etapa, otra vez los gestos. Pero no faltó mucho para que se olvidara de la molestia y acorralara a dos defensores croatas, les robara la pelota y los tuviera hasta lograr una falta a favor.
En el segundo tiempo Messi entró entero. O que le pregunten a la defensa croata que no tuvo nada que hacer ante ese baile descomunal del 10 que terminó con el segundo gol de Julián Álvarez y el tercero para La Scaloneta.
Cómo terminó físicamente Lionel Messi
Según comunicaron desde el entorno de Messi: está bien. Estos días hasta el domingo vendrán bien para descansar, recuperarse y estar mejor que nunca para la final. Pero, reconocieron, es cierto que el 10 “tenía cargado los isquiotibiales de la pierna izquierda”.
Las próximas 48 horas serán clave para ver cómo están los jugadores, incluido el capitán. Sin embargo, quedó claro que Rodrigo De Paul está bien y que el resultado ayudó a que Di María siga recuperándose para estar óptimo el domingo. Entre otras buenas, hay que decir que Marcos Acuña y Gonzalo Montiel podrán jugar la final ya que cumplieron con la sanción por amarillas.
Este miércoles, los jugadores tendrán poca exigencia, será más que nada trabajo de recuperación. Probablemente en la tarde los familiares puedan entrar al predio de la Universidad de Qatar para saludar a los finalistas.
Desde el jueves, y ya con rival definido, vendrán días de entrenamientos y preparación del partido. El más importante de todos en el último día del Mundial de Qatar.