Un estudio reveló que, entre otras cosas, casi el 70 por ciento de los estudiantes universitarios cordobeses bebe alcohol en exceso y que 1 de cada 4 toma hasta la ebriedad, al menos una vez al mes.
Estos datos son resultado del Estudio Longitudinal Sobre Alcohol (Elsa) que realizaron Angelina Pilatti y Ricardo Pautassi, docentes e investigadores de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba y del Conicet y que publicó La Voz.
Otro de los datos destacados que reveló este estudio es que el 76,3 por ciento de quienes comenzaron a beber antes de los 14 años de edad tienen episodios frecuentes de consumo por atracón (binge). Esto significa que beben cinco o más latas de cerveza de 350 mililitros (o sus equivalentes en alcohol) en un lapso inferior a dos horas. Como contraparte, el 50 por ciento de los bebedores tardíos (que empezaron después de los 15) tienen episodios 'binge'.
Por otra parte, el estudio remarcó que la aprobación de los pares y la percepción sobre la cantidad consumida por el mejor amigo/a influyen sobre las conductas de consumo personales. Incluso la gran mayoría de los estudiantes encuestados dijeron que su mejor amigo/a consumía más que ellos mismos.
"En otros estudios encontramos que existía una sobreestimación del consumo del mejor amigo. Este sesgo en la percepción de lo que beben los mejores amigos impacta sobre el propio consumo incrementándolo", declaró Pilatti a La Voz.
A su vez, los resultados arrojaron que existen cada vez menos diferencias entre los sexos. Por caso, un 63,7 por ciento de las estudiantes mujeres admitió haber tenido en los últimos 30 días al menos un episodio de Ceea. Mientras que por el lado de los hombres arrojó un 76 por ciento.
Por último, las previas y sus consecuencias también estuvieron en el ojo de este estudio. Tal es así que se comprobó que la mayor asistencia a "previas" tiene correlación con mayor frecuencia de Ceea y problemas derivados, como no poder recordar una parte de la noche anterior (55 por ciento), hacer cosas impulsivas (47 por ciento), tomar riesgos estúpidos (29,7 por ciento) o tener relaciones sexuales que después se lamentan (13 por ciento).
El estudio comenzó en 2014 donde encuestaron a cuatro mil estudiantes que los siguieron en 2015 y 2016. A su vez ese último año abrieron una nueva muestra que se continuó en 2017 y 2018. Por último, este año, entrevistaron a 1.500 nuevos estudiantes.
Lo positivo de este estudio es que se podrá utilizar para el diseño de políticas públicas según declaró Pablo Bonino, subsecretario de Prevención de Adicciones de la Provincia, a La Voz.
"Uno de los aspectos más relevantes de Elsa es que acerca la evidencia al diseño de políticas públicas. Por caso, con un subsidio del Ministerio de Ciencia y Tecnología, se financiará al equipo que dirigen los doctores Pilatti y Pautassi para diseñar y aplicar intervenciones basadas en normas sociales de consumo destinadas a disminuir el consumo de alcohol en adolescentes", aseguró.