Así es el trabajo de los pilotos de aviones hidrantes durante los incendios en Córdoba

En primera persona, un piloto relata la importancia de su trabajo. "No nos podemos permitir que alguien salga lastimado", reconoce Pedro Paczkowski.

Así es el trabajo de los pilotos de aviones hidrantes durante los incendios en Córdoba
El Polaco, piloto de aviones hidrantes en Córdoba, listo para su vuelo\u002E

"Prácticamente te salvan, es una ayuda divina", "Para nosotros son ángeles, te salvan las papas" con esas frases algunos bomberos entrevistados intentan resumir la importancia que tienen los aviones hidrantes y helicópteros a la hora de enfrentar incendios como los que se vivieron en Córdoba en las últimas semanas.

En búsqueda de más respuestas y para conocer a fondo esta tarea es que Vía Córdoba decidió entrevistar a uno de ellos, a uno de estos "locos" protagonistas como los mismos bomberos los llamaron. En esta oportunidad el que dio su perspectiva fue Pedro Paczkowski más conocido como "Polaco" por su indicativo de vuelo. 

Este piloto de aviones hidrantes, de Huerta Grande, tiene 45 años y mientras no es llamado a las campañas de incendios también se desempeña como piloto aeroaplicador y hace guardias de incendio en Chile. En Córdoba permanece en alerta desde el 1 de julio hasta el 31 de diciembre.

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"Esta es la temporada mas crítica. Casi todo agosto fue intenso porque por ahí habían otros incendios pero se controlaban rápido. Eran salidas diarias. Esta última semana fue la más critica. Era alerta roja en todo momento", cuenta el Polaco a Vía Córdoba.

Que también explican que "estás de guardia desde la mañana temprano. Estamos disponibles desde que sale el sol hasta que se pone. En total somos seis o siete pilotos que nos rotamos". Cada uno de ellos tiene permitido volar un máxima de ocho horas por jornada.

El tiro salvador

Como dijimos, los bomberos que se encuentran en el campo combatiendo el fuego valoran enormemente la tarea de los pilotos. "Vos no sabes lo que es estar peleando cara a cara con el fuego y que venga un pájaro (así les decimos nosotros) y te de una mano", reconoce un bombero voluntario que prefiere reservar su identidad.

Eso genera una gran cantidad de interrogantes como conocer la precisión a la hora de descargar el agua sobre el fuego. "Esto es un poco la experiencia que tiene uno -indica el Polaco que se dedica a esta tarea desde 2004-. Es lo mismo que lanzamiento de bomba, nosotros lanzamos agua. Acá no hay mira depende del ojo, la sensación, el viento. Uno va corrigiendo a medida que toma experiencia, ya sabe dónde y cómo hacer el lanzamiento".

Cuando comentamos lo que los bomberos dicen de la tarea de los pilotos de aviones hidrantes o de helicópteros, reconoce orgulloso: "Esa es la idea, hacerles el apoyo. Unos suben y van por una sierra con el equipo, tenes que estar entrenado, llegar y combatir el incendio. Llegan allá con la mochila y no tienen más agua. Si están haciendo ataque directo, la misión nuestra es lanzar donde está la llama y con los chicotes terminan de atender el incendio".

Y profundiza: "A veces lo que se ve de arriba el bombero no lo puede ver porque ves cosas dantescas que no lo podes manifestar. A veces te agarra un sentimiento de impotencia de decir 'por mas que le demos no va a parar'. La misión es que nadie salga lastimado o pierda algo porque le falta agua. Esto es como una guerra, tenés que combatir con alguien que no tiene códigos. Un lanzamiento de agua bien puesto salva a alguien y se ahorran tiempo de trabajo".

Estas tareas parecen tener poco lugar para la improvisación, el trabajo es en equipo y siempre se busca consensuar la mejor opción. Estando desde el cielo la vista es más óptima en algunas situaciones, por eso reconoce: "Cuando vemos de arriba que alguien está en peligro informamos y el jefe nos autoriza para hacer algo que no estaba previsto".

"Muchas veces vemos peligro en donde estan los bomberos y los jefes nos van a mandar ahí, no hay que aflojar. No nos podemos permitir que alguien salga lastimado. Hay veces que tenés que decirles que salgan corriendo porque viene un fuego que no están viendo", comenta el Polaco.

Córdoba está preparada

Cuando se conocen estos incendios de gran magnitud como los que azotaron a Córdoba en las últimas semanas, se pone en tela de juicio si la provincia está preparada para afrontarlos. Tanto los bomberos como los pilotos reconocieron que el trabajo y el Plan Provincial del Manejo del Fuego están a la altura y tienen las herramientas necesarias. "Por suerte tenemos un sistema amplio y grande. Pero llega un momento que no da a basto", se lamenta el Polaco.

Pero en la su materia, admite: "Tenemos los aviones más poderosos para el ataque inicial de incendios. La provincia tiene cuatro aviones y dos helicópteros más. Son aviones que se usan en todo el mundo. Después hay otros mas grandes, pero en costo beneficio y operacion es más rentable este tipo de aviones". Estas aeronaves tiene una capacidad de carga de 3.200 litros de agua.

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Sobre la magnitud de los incendios, Paczkowski tiene una explicación: "Hay años y años. Éste fue un año de grandes incendios, ya teníamos un indicativo que sería una temporada seca. Todo lo que es el pastizal, campos, plantas, todo el material disponible es como la nafta, cualquier descuido eso se prendió, se fue y no lo parás".

En relación a esto es que busca llevar conciencia a la ciudadanía: "Yo creo que el ciudadano de Córdoba y la sociedad entera apoya mucho a los bomberos y el sistema. Como piloto estoy para apoyarlos a ellos, me parece que la sociedad entiende bien ese tema. En esta época tan crítica no se puede hacer ni un asado, una chispa o un escape se prende fuego. Tenemos que tener máxima protección con el medio ambiente", concluye.