Reconocido por su vinculación con todas las organizaciones que protegen y cuidan a los chicos que poseen Síndrome de Down, el cordobés Francisco Bedini se ha convertido en alguien muy reconocido por todos.
Su hija que posee esa condición y que se llama Lucía es motivo de constantes posteos en sus redes sociales donde siempre aboga por la inclusión de estos niños y jóvenes.
Este martes, en su Facebook, posteó una carta que se volvió viral en pocos minutos, y que está destinada a los padres que se dan con la noticia de que su hijo tiene Síndrome de Down.
Carta a un papa de un hijo con Síndrome de Down
Cuando entres a la sala de parto y el medico te diga "Mire papa, es probable que su hijo tenga Síndrome de Down" y sientas impotencia y ganas de llorar , hacelo, no te reprimas.
Si crees que el mundo se cayo a pedazos, esta bien, es muy probable que sea así, si crees que hiciste algo mal, es muy probable que lo hayas hecho, si crees que si te lo hubieran dicho antes las cosas habrían sido diferentes.
Ahí te digo que nada puede cambiarse, si quieres culpar a la medicina, hacélo estás en todo tu derecho. Si te parece que Dios es el culpable, sin dudas él tiene la culpa.
Cuando hayas sentido todo eso y te hayas cansado de llorar y torturarte con un futuro oscuro, toma a tu hijo en tus brazos miralo a los ojos y preguntate ¿valió la pena las lágrimas derramadas?
Claro que no, un hijo es un hijo, mas allá de su condición.
¿El mundo se cayó? No, para nada comienza un nuevo mundo lleno de intrigas, éxitos y fracasos. Pero por sobre todo, lleno de alegrías.
Si crees que SOS culpable del síndrome de tu hijo sentite orgulloso porque es sangre de tu sangre, si crees que si hubieras sabido antes hubiera sido distinto, para nada , nada hubiese cambiado.
Sí, Dios es el culpable, creo que sí pero después le vas a estar inmensamente agradecido por el honor que te ha dado.
Si te hiciste la pregunta ¿por qué me pasa esto a mí? Cambiala y preguntate "por qué no podía pasarme a mí"
Te digo porque conozco ese mundo es maravilloso comenzase a ver la vida desde otra óptica. Comenzar a valorar el camino recorrido y no el resultado logrado .
Aprende de tu hijo te va a dar nuevos ojos.
Y cuando hayas superado todo este dolor ayuda a otro papa a superarlo también.
Somos muy afortunados aunque al principio no parezca.
