Esta semana, toda la comunidad cordobesa se conmocionó ante el asesinato de Federico Agüero (27), un murguero, tatuador y diseñador que luego de ser asaltado por dos jóvenes, fue atacado por uno de ellos con un golpe en la cabeza, que se volvió letal. El crimen sucedió en las esquina de Barbados y Nicaragua de la ciudad de Córdoba, a tres cuadras de su casa.
Según la nota publicada por el diario Clarín, se trató de dos chicos "que le cruzaron una moto y le robaron el celular la billetera". Pero antes de escapar, uno de ellos "le dio un golpe en la cabeza, presuntamente con una piedra o una maza".
Hasta el momento, según informó La Voz del Interior, sólo hay un detenido: Agustín Olivares, un joven de 18 años acusado de homicidio en ocasión de robo. Según el mismo medio, la policía ya tiene identificado a un presunto cómplice, y no descarta que hayan participado más personas en el crimen. La investigación la lleva adelante Alfredo Villegas, fiscal del Distrito 2, Turno 5.
La conmoción por el crimen se sintió en redes sociales. "Mataste la alegría, y no solo la de un barrio, mataste la alegría de varios sectores. Mataste el carnaval que en febrero va a bailar frenéticamente al ritmo de los tambores con una mueca de sonrisa, gritos desaforados y una catarata de lágrimas rodando desde los ojos de cada murguero", escribió Federico, un amigo de la víctima en una carta publicada en Facebook, para los autores del crimen.
