Aún débil, el peso se devalúa por el arrastre del real brasileño

Desde enero, el real perdió un 19% de su valor y esto pega de lleno en Argentina porque Brasil es el principal socio comercial del país.

El dólar en Mendoza, está imparable.
El dólar en Mendoza, está imparable.

Con el enfriamiento de la crisis turca se tranquilizó la tormenta en los países emergentes, pero la calma no ha había llegado del todo a la Argentina que ya apareció un nuevo factor de presión para el peso: la devaluación del real brasileño.

Y como si fuera poco, este miércoles apareció también la Reserva Federal de los Estados Unidos avisando que pronto podría volver a subir la tasa de interés, lo que convertiría a ese país en una aspiradora de divisas que fortalecerá aún más al billete verde.

La cotización oficial del dólar volvió a escalar unos 27 centavos este miércoles en la plaza cambiaria porteña para ubicar el precio del billete verde en los 29,77 para la compra y 30,82 pesos para la venta, según el promedio realizado por el Banco Central en las ventanillas.

La debilidad del peso y su escasa resistencia a los shocks externos se evidencia en que el mercado ayer operó sólo 417 millones de dólares, un 8,5% menos que en la jornada previa, y el nivel más bajo en lo que va de agosto. La causa es la escasez de la oferta privada.

En ese contexto, el tipo de cambio escaló 25 centavos en el segmento mayorista y cerró arriba de los 30 pesos por primera vez en la historia, a 30,25 pesos. En el mes ya acumula un alza del 10%.

Las pizarras del Banco Galicia ubicaron al tipo de cambio minorista en los 30,95 pesos. Las entidades ICBC, BBVA Francés, Supervielle e Itaú posicionaron al billete verde en los 30,90 pesos vendedor.

Nuevas presiones

El peso argentino viene con un derrotero complicado. Una vez que se tranquilizó el tembladeral de los países emergentes gracias al enfriamiento de la crisis de la lira turca, apareció Brasil con su real a la baja.

El dólar cerró al alza en territorio brasileño, acumulando así su sexta suba consecutiva. Escaló hasta los 4,05 reales –cerca de su mínimo en 20 años- en medio de la incertidumbre política por lo que ocurrirá en las elecciones presidenciales de octubre próximo.

Recientes encuestas de intención de voto muestran un escenario difícil para el candidato que más agrada al mercado, Geraldo Alckmin, y la posibilidad de segunda vuelta con la participación del PT liderado por el encarcelado Luiz Inácio "Lula" Da Silva.

Desde enero, el real perdió un 19% de su valor, afectado por el alza de las tasas en Estados Unidos y los temores de una guerra comercial entre Pekín y Washington.

Ahora, en las últimas semanas comenzó a tallar fuerte la ausencia de candidatos promercado fuertes para las elecciones de octubre, que se presentan como las más inciertas de las últimas décadas.

La depreciación del real pega de lleno al país porque Brasil es el principal socio comercial de la Argentina, con un intercambio que actualmente ronda los 22.500 millones de dólares, el nivel más bajo de los últimos diez años.