Un 25 de julio, pero en 1992, se inauguraban los Juegos Olímpicos de Barcelona. La canción oficial del evento llevaba el mismo nombre que la ciudad española y sería interpretada por dos grandes artistas: Freddie Mercury, cantante del grupo Queen, y la soprano catalana Montserrat Caballé. Pero no todo salió como esperaban.
El vocalista murió en 1991 y no pudo cantar con la soprano en el Estadio Olímpico de Barcelona. Sin embargo, dejó esta versión inolvidable ante las fuentes de Montjuic con un enorme coro y el logo olímpico detrás.
El vocalista murió en 1991 y no pudo cantar con la soprano en el Estadio Olímpico de Barcelona el 25 de julio de 1992. Sin embargo, una versión inolvidable ante las fuentes de Montjuic con un enorme coro y el logo olímpico detrás.
Según explicó Caballé en una entrevista con Verne, Mercury estaba empecinado en interpretar una canción con la cantante lírica, decía que era su artista favorita. Y lo logró, juntos llegaron a grabar un álbum que promocionaron durante tres años.
Continua leyendo en Rumbos Digital.