Fernando Báez Sosa, el joven asesinado de 18 años por un grupo de rugbiers en Villa Gesell, murió por un traumatismo severo de cráneo, producto de un golpe muy fuerte en la cabeza que le provocó un sangrado interno y la muerte inmediata, según estableció la autopsia. Además, el adolescente presentaba un fuerte golpe en la mandíbula.
En la madrugada de este jueves, los 10 rugbiers imputados se negaron a declarar. El que sí lo hizo fue Pablo Ventura, el último detenido en la causa, en la fiscalía de Villa Gesell.
Báez Sosa murió en la madrugada de este sábado como consecuencia de los golpes que recibió durante una pelea fuera del boliche Le Brique, en dicha localidad bonaerense, donde participaron de la riña jugadores de rugby de un club de Zárate.
La pelea se registró pasadas las 5 en la puerta del boliche ubicado en avenida Buenos Aires y calle 102, donde dos grupos de entre cinco y seis jóvenes se propinaron patadas y golpes de puño en la vereda del lugar.
La pelea habría comenzado en el interior del boliche y terminó en la vereda, donde el joven fallecido recibió un fuerte golpe en la cabeza que lo dejó inconsciente. Luego, fue trasladado en una ambulancia hasta el hospital Illia, de Villa Gesell, ubicado en avenida 8 al 2200, donde fueron infructuosos los intentos para reanimarlo.
Ese grupo que viajó a Villa Gesell desde la localidad de Zárate se hospedaba en una casa a 200 metros de Le Brique, un chalet de dos plantas situado sobre la calle 202, en la entrada al Bosque Pinar.
Los detenidos fueron identificados como Matías Franco Benicelli, de 20 años, uno de los que fue identificado como presunto autor de la golpiza; Ayrton Michael Viollaz (20); Máximo Pablo Thomsen (20); Luciano Pertossi (18); Ciro Pertossi (19); Lucas Fidel Pertossi (20); Alejo Milanesi (20); Enzo Tomás Comelli (19); Juan Pedro Guarino (19); Ciro Pertossi (19) y Blas Sinalli (18).