El equipo dirigido por Sergio Hernández sigue haciendo historia. Primero dejó en el camino a Serbia, asegurando su boleto para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Ahora, el conjunto albiceleste aplastó a Francia, una de las potencias del torneo y jugará la final ante España.
Minutos después del triunfo, todo el plantel argentino celebró la clasificación a la final, con la ilusión de conseguir por segunda vez en la historia la copa del mundo en la disciplina, algo que no se logra desde la primera edición del torneo, que se celebró en Buenos Aires en 1950.
Con el ala-pivot Luis Alberto Scola como referente del equipo con 39 años y el extraordinario nivel del base cordobés Facundo Campazzo, los jugadores argentinos con festejaron efusivamente: "Señores dejo todo, me voy a ver a Argentina, porque los jugadores me van a demostrar que salen a ganar, quieren salir campeón, que lo llevan adentro, como lo llevo yo" cantó todo el equipo entre chiflidos y aplausos de alegría.