En 2011, Emilia Clarke obtuvo el papel de Daenerys Targaryen en Game of Thrones (GOT), lo que la hizo ganar reconocimiento mundial. La actriz comenzó su carrera en Médicos, el programa de la BBC, y tuvo otros papeles secundarios después de ese. Además de hacer un trabajo de voz en off para la caricatura Futurama, protagonizó en el teatro Breakfast at Tiffany's en Broadway.
Fue nominada para un Emmy y ganó un Premio EWwy a la mejor actriz de reparto en un drama.
Además, ha colaborado en películas como Solo: A Star Wars Story y Me Before You. Recientemente, también ha realizado campañas para Dolce y Gabbana y Dior, y estos acuerdos de patrocinio seguramente se sumarán a su enorme riqueza.
En el rodaje de GOT, Clarke ganó mucho dinero tras obtener alrededor de 500.000 dólares por cada episodio.
Pero ella no es la única que se ha enriquecido. Sus compañeros de elenco también han hecho una gran fortuna con GOT. Se cree que Clarke es la tercera estrella más rica que trabajó en el programa después de Nikolaj Coster-Waldau y Peter Dinklage.