Un nuevo conflicto mapuche en Villa Mascardi se desató en las últimas horas. El dueño de las cabañas Los Radales fue víctima de otro ataque en su propiedad, y apuntó contra la comunidad originaria Lafken Winkul Mapu, que ocupa un predio cercano al lugar de los hechos.
Según denunció públicamente el damnificado, un grupo de encapuchados agredieron a los gendarmes que cuidan la zona y luego incendiaron la casilla de Gendarmería. La misma custodiaba el lugar hacía dos semanas, luego de un ataque similar que se desarrolló tiempo atrás.
Ahora, las tensiones se reavivaron. El lunes 26, en horas de la madrugada, los oficiales habrían recibido pedradas e incluso tiros por un grupo de personas. Más tarde, se produjo el incendio en el inmueble y otro en un galpón.
La seguridad había sido puesta luego de que vandalizaran el predio anteriormente. La Fiscalía Federal de Bariloche había solicitado hacía dos semanas atrás que la fuerza federal militarizada ocupara la propiedad privada, tomada por mapuches y destruida por ellos mismos.
La cabaña afectada se encuentra a 50 metros de la ruta 40 y contaba con guardia permanente. En esta nueva oportunidad, los encapuchados la habrían rodeado y, acto seguido, arrojado líquido combustible para provocar las llamas. Lo mismo presuntamente hicieron con un galpón de esa propiedad.
Los antecedentes de las comunidades mapuches en Villa Mascardi
El 1° de agosto los vecinos de la localidad rionegrina dieron aviso a los bomberos luego de que se prendiera fuego por completo una vivienda de la zona. Las sospechas de que fue un acto intencional, ocasionado por las comunidades mapuches, cobraron fuerza.
Trabajaron 30 bomberos en total aquella madrugada. El personal policial también estuvo presente y continuó en el lugar unas horas, para luego dirigirse a la Policía Científica y encarar los peritajes buscando indicios de criminalidad.
El legislador rionegrino de Juntos por el Cambio, Juan Martín, tras enterarse de lo ocurrido, analizó las pistas halladas y aseguró: “Como tenía cuidador, esperaron el momento de que no estuviera para incendiarla”.
Asimismo, Luis Dates, dueño del inmueble, confesó que no tiene ninguna duda de quienes fueron los responsables y argumentó: “Antes de que se instalen los mapuches en Villa Mascardi, las casas quedaban vacías durante gran parte del año. Ahora no pueden quedar sin gente ni media hora porque te las queman o te las usurpan”.