La provincia puso en marcha una ley que fue considerada superadora a la ley nacional, ya que prohíbe fumar en lugares públicos abiertos como canchas de fútbol, también hacerlo con los cigarrillos electrónicos, en tanto que se toma a la adicción al tabaco como una enfermedad.
La ley entró en vigencia en enero pasado y si bien aún están ajustándose algunos detalles de la reglamentación, tiene un fuerte alcance en una provincia donde los hogares expuestos al consumo del tabaco compuestos por fumadores activos y pasivos superan la media nacional y llegan al 30% de acuerdo a los últimos datos estadísticos con que cuentan las autoridades de Salud.
En la isla se repiten las mismas dificultades de vida de las provincias patagónicas: el encierro generado sobretodo por el mal clima genera sedentarismo y hábitos de vida poco saludables. Por esto está norma crea un Programa Provincial de Control de Tabaco que es transversal a otros programas que se llevan adelante desde el ministerio de Salud fueguino.