Los entrenadores y directivos de Colón se solidarizaron este miércoles con la familia de un juvenil herido de bala en el norte de la provincia. El futbolista de las inferiores fue derivado desde su ciudad natal a Santa Fe y su padre se mostró desconcertado ante la posible causa del episodio.
Marcelo Rosatti fue atendido en el Hospital Cullen tras recibir un disparo en el pecho el día anterior en Malabrigo, a casi 290 kilómetros de la capital. El club se hizo eco de la grave situación, pero también lo hizo Unión a través de un comunicado para enviarle fuerzas al jugador.
"La verdad no sé qué pasó, él está bien, está consciente", manifestó el papá del adolescente ante la consulta de Radio Sol después del traslado desde Reconquista. A la espera del último informe de los médicos, Carlos Rosatti le agradeció a los dirigentes rojinegros que lo acompañaron en el centro de salud y se mostró confiado en la evolución favorable de su hijo.
Como muchos otros chicos que llegan a Santa Fe para tratar de convertirse en profesionales, Rosatti estaba alojado en la pensión de Colón. En diálogo con Cadena Oh, el entrenador Martín Minella consideró que se trata de un joven "muy bueno, alegre y positivo" y confesó: "No lo podemos creer por cómo es él".
