Con tres remates atajados en el desempate, no quedaron dudas de que Jorge Broun fue la figura del triunfo de Rosario Central sobre River Plate en la semifinal de la Copa de la Liga Profesional 2023. Para agregarle una cuota extra de heroismo, el arquero admitió este sábado en Córdoba: “Hoy estuve todo el día sin comer, pero tenía que estar”.
La semana anterior, el futbolista de 38 años y otros integrantes del plantel sufrieron una intoxicación digestiva luego de la primera ronda de los playoffs, cuando el Canalla eliminó a Racing en Salta. “A mí me agarró bastante fuerte”, reveló mientras celebraba en el estadio Mario Alberto Kempes.
Broun no entró a la cancha en condiciones óptimas, pero estaba dispuesto a todo para jugar con el Millonario y cumplió con creces. Atajó los tres primeros penales y se fue con la valla invicta.
¿Qué le pasó a Jorge Broun antes del partido con River?
Cuando el plantel de Rosario Central regresó de Salta, Jorge Broun fue una de las víctimas de una “pequeña intoxicación”. Después de la victoria ante River en Córdoba, reconoció que vivió una semana “complicadísima” por ese problema de salud.
En el reportaje posterior al partido, “Fatura” le mandó un beso especial a su esposa Gisel por lo que atravesaron en estos días. “Es la que está siempre”, comentó en diálogo con ESPN.
Además de los inconvenientes futbolísticos, el exarquero de Gimnasia y Colón detalló que la intoxicación le dio un golpe duro al corazón. Debido a la semifinal en Córdoba, Broun se perdió la actuación de su hija Catalina en el Teatro Broadway. Al respecto, explicó: “Estaba bastante destrozado de la panza y no la pude llamar antes”.
Tras las dedicatorias familiares, el capitán auriazul se acercó a saltar y cantar con la hinchada en una medianoche épica. “Poder jugar una final con el equipo del que soy hincha, que amo, es hermoso”, manifestó.
Parecía difícil, pero Broun se superó a sí mismo en la definición por penales. Ante Racing había atajado dos remates y esta vez no le convirtieron ninguno. En primer lugar, Enzo Díaz y Agustín Palavecino patearon al medio. Después, el arquero se arrojó hacia su derecha y desvió el disparo de Gonzalo Martínez, una acción que hizo explotar la tribuna canalla.