Tal vez el haber perdido amigos en el río fue el factor que llevó al payaso Lucas Bruno a no dudar en tirarse al río cuando este martes escuchó que un joven se ahogaba en el Paraná a la altura de calle Moreno.
El artista que disfrutaba en el parque con dos amigas nadó 50 metros para salvar a un chico que estaba aferrado a una piedra a punto de ser llevado por la corriente. Cuando los socorristas arribaron, la tarea estaba completa.
"No lo dudé. Es complejo explicarlo ahora, pero me acerqué a la barranca y como conozco la zona, sabía que mucho más no iba a aguantar y tenía que hacer algo para rescatarlo", explicó Lucas, en contacto con Vía Rosario.
La historia la difundió el mismo payaso a través de Facebook este miércoles. "Fueron dos sujetos quienes nos avisaron que escuchaban gritos que venían del agua. Cuando accedimos a la costa era verdad, había alguien que pedía socorro y como podía decía que se estaba ahogando, que ya no lograba sostenerse", relató.
"Apenas pude divisar al chico, me acerqué al agua y me tiré. Nadé 50 metros y con calma logré que se aferre a mi. Así pude llevarlo a una zona segura" expresó Lucas.
El problema fue cuando el improvisado rescatista quiso volver a la costa. "Estaba tan cansado que se me hizo muy difícil la vuelta. Al final pude lograrlo. En tierra firme me encontré con el personal de rescate que se dispuso a ir a buscar al chico que ya estaba sentado en una roca seguro", agregó.
La historia tuvo un particular desenlace. "Me olvidé el nombre del chico, solo alcancé a pasarle mi Facebook. Dijo que me iba a buscar en al red social y que nunca más se iba a olvidar de mi. Espero volver a verlo", planteó Lucas.