El municipio confirmó que a partir de este sábado el boleto del Transporte Urbano de Pasajeros (TUP) pasará a costar $30, mientras que desde el 29 de septiembre el valor pasará a ser $32,50. Concejales opositores criticaron la medida y la forma en la que se aplicó.
El concejal justicialista, Eduardo Toniolli, consideró que al final, teniendo en cuenta el ajuste que se había hecho en junio, terminó siendo un aumento desdoblado, considerando la cercanía con el nuevo incremento.
Señalo que para eso, la intendenta Mónica Fein "recurrió a una manganeta de dudosa legalidad" para estirar la potestad que le permitía fijar la tarifa de colectivo sin pasar por el Concejo, la cual estaba vigente "solo hasta el último día de junio".
"El objetivo es el de siempre: no mostrar los números, evitar el debate democrático. En Rosario no sólo tocó fondo la cantidad de boletos vendidos (la más baja en 40 años), también tocó fondo el modelo de gestión del TUP. Barajar y dar de nuevo", manifestó.
Por su parte, la concejala Renata Ghilotti, de Juntos por el Cambio, criticó que la propuesta de incremento "no fue dada a conocer en el Ente de la Movilidad", y reiteró el argumento de que los poderes para subir la tarifa automáticamente vencieron el 30 de junio.
"Hace casi dos meses advertíamos que desde el Municipio estaban estirando la norma como un chicle, utilizando un artilugio legal que dejaba la puerta abierta a un nuevo aumento a espalda de los ciudadanos; y hoy, lamentablemente para todos los rosarinos, lo confirmamos", recordó.
"Definitivamente Fein se va de la Intendencia con un fracaso rotundo en materia de transporte", aseguró la concejala y agregó que "no es el momento de seguir metiéndole la mano en el bolsillo a la gente, siempre hay otras alternativas".