Una vecina de un edificio del barrio 120 de Río Gallegos, compartió en su cuenta de Facebook la foto de un cartel que pegaron en el inmueble con quejas por “ruidos de sexo” por parte de sus vecinos. Según detallaron en el papel, los culpables serían “los vecinos de planta baja”.
La queja es por “los ruidos de noche de sexo” que, según detalla el cartel, “se escucha todo al lado, los quejidos y la cama”. La convivencia no suele ser simple y menos en lugares grandes o en dónde las paredes son finas, y en más de una oportunidad se viralizaron mensajes de este estilo en las redes sociales.
Para lograr convencer a los acusados de que “bajen el volumen”, en la nota apelan no solo al respeto pro sus vecinos, sino a que tengan consideración: “Por favor, hay menores”. Por otro lado, en diálogo con La Opinión Austral, la mujer agregó este no fue el único inconveniente con estas personas: ahora “se calmaron con la música fuerte que solían poner a diario”.
En los comentarios de otros usuarios, hubo mucha controversia entre “dejen vivir” libremente a los vecinos o estar a favor a su reclamo.