La Justicia de Chaco encontró más rastros de sangre humana entre las pertenencias del clan Sena de cara a la investigación por la desaparición de Cecilia Strzyzowski. Esta vez, estaban en la camioneta de César Sena, vehículo en el que habría trasladado el cuerpo de la víctima.
Si bien estas muestras fueron tomadas días atrás, el viernes 21 de julio llegaron los primeros análisis de las mismas: son de un humano. Por lo tanto, aún resta determinar si se tratan de la joven de 28 años que habría sido asesinada por el dueño del rodado y sus padres.
En base al documento al que accedió Infobae, la sangre fue encontrada en la parte trasera de la camioneta: “Ante el resultado positivo (+) en la detección de sangre humana en la MUESTRA N° 2A (consistente en un (1) hisopo con muestra recolectada del sector trasero de pick up Toyota Hilux”.
Según la hipótesis de los fiscales, luego de asesinar a Cecilia el viernes 2 de junio al mediodía junto a Emerenciano Sena y Marcela Acuña, César subió y transportó el cuerpo de la joven a las 18:52 horas en su camioneta. Lo llevó a la chanchería de su padre mientras lo acompañaba en otro rodado Gustavo Obregón.
Por su parte, Nelia Velázquez, miembro del equipo fiscal especial que investiga este caso, informó el viernes 28 de julio a VíaPaís que ya se solicitó al Instituto de Medicina y Ciencias Forenses de Chaco (IMCiF) que analice la compatibilidad de las muestras halladas con el ADN de Strzyzowski.
La sangre hallada en los muebles de los Sena sí era de Cecilia Strzyzowski
Un resultado clave fue revelado este jueves 13 de julio por la Justicia de Chaco: los rastros de sangre hallados en la casa de los Sena efectivamente coinciden con el ADN de Cecilia Strzyzowski. La hipótesis que apunta a un brutal femicidio cada vez cobra más fuerza.
La fiscal Velázquez, entre tanto, confirmó la noticia en diálogo con este medio. Los estudios fueron realizados por el Instituto de Medicina y Ciencias Forenses de Chaco (IMCiF), dependiente del Poder Judicial local.
En horas del mediodía, el equipo recibió las pericias genéticas que le hicieron a un colchón y a una parrilla de cama, ambos encontrados en un allanamiento dentro de la casa de los imputados (calle Santa María de Oro al 1460, ciudad de Resistencia).