Miriam González tiene 59 años, es Auxiliar de la Educación y tiene como diagnóstico una retinopatía diabética. Para no perder la vista debe someterse a un tratamiento de 6 colocaciones de inyecciones oculares, la cuales tienen un costo de colocación de 56.000 pesos cada una, con un total de 340.000 pesos.
Su hija Soledad vendió rifas para ayudarla, ya que IOMA cubre la droga pero no la colocación de las inyecciones, pero la solidaridad de Punta Alta no se hizo esperar y muchos se sumaron para colaborar.
“Mamá tiene una discapacidad de columna, una neuropatía diabética -vive con dolor- y retinopatía diabética, la cual necesita someterse a un tratamiento en sus ojos para no ir a la ceguera ,es muy difícil costear todo que ya venimos estos últimos 3 años sin respirar”, indicó.
“Ella ve poco y nada, tiene cicatrices de la sesión de láser. Mientras se hacía estudios para operarse de las cataratas, le descubrieron que tenía un sangrado en ambos ojos y le hicieron tratamiento de láser y pudieron frenar el sangrado. Pero ahora debe hacer el tratamiento de inyecciones oculares. Es para frenar el desprendimiento de retina lo que le va ocasionar la ceguera si no lo hace”, manifestó.
Las rifas tenían un valor de $300 con 25 premios y se sorteará hoy sábado 14 de enero.
