El consumo ilegal de partidos de fútbol no para de crecer en Argentina. Entre 2020 y 2024, la cantidad de usuarios que acceden a transmisiones deportivas sin autorización se triplicó: pasó de 5 a más de 14 millones. Este fenómeno representa no solo una tendencia cultural, sino también un grave problema económico para la industria del deporte.
De cinco a catorce millones: un crecimiento que alarma
Según información brindada por LM Neuquén, las plataformas de streaming pirata generaron ingresos superiores a los 100 millones de dólares anuales, mientras que los derechos deportivos legales dejaron de percibir más de 258 millones de dólares. Una pérdida significativa que impacta directamente en clubes, productoras y organismos de televisión.

El fútbol argentino —una de las pasiones más fuertes del país— se convirtió en un blanco perfecto para las redes ilegales, que ofrecen partidos en vivo de forma gratuita y sin restricciones geográficas.
Magis TV: el gigante pirata en la mira judicial
Una de las plataformas más mencionadas en este contexto es Magis TV, un servicio ampliamente difundido entre los usuarios que buscan acceder a partidos sin pagar una suscripción oficial. Aunque Magis TV no está disponible en tiendas oficiales como Google Play, su popularidad creció exponencialmente a través de APKs, redes sociales y foros.
La Justicia argentina, en un intento por frenar esta escalada, ordenó en septiembre de 2024 el bloqueo de todos los dominios asociados a Magis TV, además de exigir a Google que impida la instalación de la app en dispositivos Android.
Estas medidas se suman a las acciones realizadas en julio del mismo año contra otros sitios conocidos como Fútbol Libre y Megadeportes, involucrados en la retransmisión no autorizada de eventos deportivos. En total, más de 50 dominios fueron dados de baja, en lo que representa una de las ofensivas judiciales más fuertes contra la piratería digital.
