El gobierno argentino está alistando una cargada agenda de trabajo con los Estados Unidos y sus empresas para septiembre, con numerosos viajes y reuniones para intentar incrementar las exportaciones a ese país y conseguir inversiones para el desarrollo local de la minería y los hidrocarburos.
Esto fue revelado por el embajador argentino en los Estados Unidos, Jorge Argüello, en una conversación con su par estadounidense Marc Stanley, en la 19° Reunión del Consejo de las Américas que se desarrolló este jueves en un hotel porteño tras tres años de virtualidad por la pandemia de Covid-19.
En el intercambio entre Argüello y Stanley se habló de la necesidad de que la Argentina pueda generar estabilidad en su economía -suprimiendo por ejemplo la inflación y la volatilidad de su moneda- y también un conjunto de “reglas claras y transparentes” para dar certidumbre de largo plazo a las inversiones y el financiamiento que el país necesita y está buscando para desarrollarse.
El intercambio comercial entre ambos países es de unos 11.000 millones de dólares, que resulta deficitario en unos mil millones de dólares paras la Argentina. “Solo el 0,2% de lo que importa Estados Unidos del mundo entero proviene de la Argentina. Debemos multiplicar nuestras exportaciones a este mercado”, dijo el embajador argentino.
Cómo será la agenda del Gobierno en los Estados Unidos durante septiembre
El primero en desembarcar en los Estados Unidos a principios de septiembre será el ministro de Economía, Sergio Massa. El funcionario nacional viajará a Washington para reunirse con autoridades de la Casa Blanca, del Tesoro, del Fondo Monetario Internacional, de los bancos multilaterales e inversores.
Luego, promediando septiembre, el presidente Alberto Fernández visitará la Casa Blanca para la reunión bilateral a la que lo había invitado el jefe de Estado estadounidense, Joseph Biden, que se había suspendido en julio por el cuadro de Covid-19 que atravesó el anfitrión.
Fernández volverá a la Argentina y pocos días después regresará a los Estados Unidos, el 20 de septiembre, para participar de la inauguración de la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas.
Argüello comentó que se aprovechará ese segundo viaje de Fernández a los Estados Unidos para producir eventos orientados a la promoción del comercio y las inversiones, primero en Nueva York y luego en Houston, la capital petrolera de los Estados Unidos.
“Vamos a tener en Houston una reunión intensa de trabajo con todas las compañías norteamericanas que ya invierten o que están pensando invertir en el yacimiento de Vaca Muerta”, comentó el embajador argentino.
A su vez, Stanley dijo que hay empresas estadounidenses que le están “golpeando la puerta” a la Argentina porque quieren empezar a invertir o multiplicar las inversiones que ya tienen en marcha. Y enumeró algunas de ellas: Exxon Mobil y Chevron.
El diplomático estadounidense dijo que hay más empresas que quisieran ingresar, pero antes necesitan la seguridad de que haya “transparencia” y “reglas” y que “estas no sean sometidas a las diferencias de los distintos gobiernos” de turno.
El embajador argentino respondió que Fernández viajará para darles a las compañías estadounidenses la seguridad de que habrá una ley de hidrocarburnos que establecerá reglas de largo plazo, para dar certidumbre a las inversiones.
Argüello aseguró que serán fundamentales las inversiones estadounidenses en Vaca Muerta, no solo para extraer el gas, sino para transportar y para licuefaccionar el producto para poder exportarlo a la Unión Europea.
“Es importante lo que dijo Marc. Estamos de acuerdo. Se necesitan reglas claras, conocidas, previsibles, a las cuales todos los inversores y receptores de esas inversiones se atengan. Eso es la madurez y la seriedad que el país debe ser capaz de mostrar para garantizar el flujo de inversiones”, dijo el argentino.
Y luego, sobre fin de septiembre, la embajada recibirá la visita de diez gobernadores argentinos, que mantendrán reuniones de negocios con compañías estadounidenses interesadas en invertir en el país o en importar productos determinados.
“Vamos a convertir la embajada en una inmensa ronda de negocios, en la que cada gobernador va a tener un despacho para trabajar cara a cara con las compañías que ya estamos contactando”, dijo el embajador.
Argüello comentó que, por ejemplo, él viene trabajando con el gobernador de Entre Ríos, Gustavo Bordet, para lograr que Estados Unidos le compre a esa provincia mandarinas y naranjas.
El embajador también está trabajando con Gustavo Sáenz (Salta), Gerardo Morales (Jujuy) y Raúl Jalil (Catamarca) para obtener inversiones para el desarrollo del litio y la industrialización del sodio en esas provincias.
