Miguel Ángel Burgo era un delincuente apodado “Chucky”, y murió días atrás en un intento de robo. Chucky había ganado notoriedad en 2002, al protagonizar la toma de rehenes en un supermercado de Gerli, partido de Lanús. Burgo tenía 34 años al momento de su muerte, causada por una puñalada que le propinó una de sus víctimas.
Según lo trascendido, un hombre y su hijo habían acordado la compra de un vehículo mediante una red social, pero al llegar al lugar se encontraron con una trampa y la intención de los supuestos vendedores de robarles el dinero. El hecho tuvo lugar el pasado viernes, en la calle Sarmiento al 800, a una cuadra de la Autopista Buenos Aires - La Plata, en la zona de Dock Sud, partido de Avellaneda.
El hombre 58 años, su hijo de 26 y otro joven llegaron a la cita en una camioneta Shineray X30, donde harían la transacción por la compra de un automóvil Peugeot 206. En el lugar, fueron sorprendidos por cuatro asaltantes armados que llegaron en dos motocicletas, y les exigieron el dinero y las pertenencias.
En ese marco, se produjo un forcejeo, que terminó con las víctimas heridas de bala y con uno de los delincuentes apuñalado. Tres de los asaltantes escaparon pero el herido finalmente cayó muerto a unos doscientos metros, en la esquina de las calles 25 de Mayo e Hiroshima. La policía constató luego que se trataba de Miguel Ángel Burgo, alias “Chucky”.
Los heridos fueron trasladados al hospital Fiorito de Avellaneda, donde el joven de 26 años ingresó con una herida de arma de fuego en la mano derecha, otra en el tobillo izquierdo y otras tres en la pelvis, con orificio de entrada y salida. Su padre, asimismo, sufrió un impacto de bala en la mano derecha y otra en el abdomen, con orificio de entrada y salida. Afortunadamente, ambos se encuentran estables, sin riesgo de vida.
La noche en que “Chucky” se hizo famoso
“Chucky” saltó a la triste fama el 19 de julio de 2002 y con tan solo 14 años edad. Entonces, ingresó a robar junto a dos cómplices a un supermercado de la desaparecida empresa “Eki”, situado en Pavón al 2300, de Gerli, partido de Lanús.
En esa ocasión, “Chucky”, Cristian “Chispita” González y Gabriel “El Oreja” Verón entraron a punta de pistola, redujeron a los empleados y se alzaron con la recaudación. Sin embargo, justo antes de salir un patrullero que pasaba advirtió movimientos extraños y, al presentarse en el local, los delincuentes iniciaron la toma de rehenes.
En principio eran 18 personas, pero luego los ladrones dejaron salir a cuatro niños cuando la avenida Pavón ya estaba tomada por los patrulleros y los noticieros transmitieron en cadena lo que estaba ocurriendo. Quienes quedaron adentro vivieron cuatro horas fatídicas, dado que los adolescentes se alcoholizaron, potenciando su agresividad. De hecho, “Chucky” llegó a salir a la vereda y efectuó varios disparos al aire para provocar a los uniformados.
Tras las negociaciones con el Grupo Halcón, la banda se entregó y “Chucky” salió del supermercado tambaleándose a raíz del estado de embriaguez que tenía, cayó de rodillas al suelo, vomitó y fue finalmente apresado por los efectivos.
Seis años después, Burgo fue acusado y quedó detenido por la Justicia de Lomas de Zamora por ser el presunto líder de una banda de secuestradores exprés que había cometido al menos cuatro hechos bajo esa modalidad entre junio y julio de 2008 en localidades del sur del Gran Buenos Aires.
Por su parte, en el lugar donde cayó muerto “Chucky”, personal de la comisaría 3ra de Avellaneda secuestraron una pistola y una moto Yamaha YBR250. La causa, calificada legalmente como “homicidio en ocasión de robo”, es llevada por la fiscal Alejandra Olmos Coronel, a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 1 de Avellaneda, que aguardaba el resultado del informe de autopsia al cuerpo de Burgo.