El clásico Cyrano de Bergerac llega a Mendoza

La comedia heroica musical fue adaptada por el platense Claudio Acevedo, que además dirige y actúa en la obra. Con un prestigioso elenco local y música original de Ángel Mahler.

El clásico Cyrano de Bergerac llega a Mendoza
Acevedo

La comedia heroica musical Cyrano de Bergerac llega a la Sala 2 de la Nave Cultural de Mendoza en dos funcions, el 27 y el 30 de junio. Se trata de una adatación del clásico de Edmond Rostand realizada por el platense Claudio Acevedo. El barítono es también quien dirige y protagoniza la obra.

Acevedo es un reconocido cantante lírico a nivel internacional, docente, director teatral, reggisseur, autor. Tiene 34 años de trayectoria profesional y ha superado las 10.000 presentaciones oficiales.

Cyrano de Bergerac se estrena en Mendoza con música original de Ángel Mahler y un prestigioso elenco local, además de Acevedo. Actúan: Rocío García, Alejo Lascano, Natalia Polo, Guillermo Olarte, Jimena Semiz, Roberto Abdala, Julia Crosta, Melina Dalmazo, Julieta Merguiso, Bruno Palero y Eduardo Sosa. 

Las funciones son los días jueves 27 de junio a las 21:30 y domingo 30 de junio a las 19.30. Ambas son en la Sala 2 de la Nave Cultura (españa y Maza, Cuidad).

Las entradas tienen un valor de $150 general y $120 estudiantes y jubilados. Pueden adquirise aquí por internet o en la boletería de la Nave cultural, que está abierta los martes de 10 a 13 y de miércoles a sábado de 10 a 13 y de 18 a 21, domingo de 18 a 21. Los lunes está cerrada.

La historia 

La historia transcurre en París, Francia, en el año 1640. Cyrano es un espadachín atrevido, pícaro, muy orgulloso y muy noble, tan bueno con su espada en un duelo como con una pluma al escribir poesías románticas, pero lo que más se destaca en él es su enorme y fea nariz, que lo hace ver tan feo que se siente incapaz de conseguir el amor de la dama a la que adora: Roxanne. Ella disfruta de sus versos pero no puede ver la belleza del alma de Cyrano.

Roxanne conoce a Cristián, un joven mosquetero muy bello, y cree estar enamorada de él. Pero Cristián solo tiene belleza en su rostro. Su alma, aunque noble, es incapaz de hablar con delicadeza a una dama. Y no sabe entonces cómo hacer para conquistar el corazón de Roxanne.

Cyrano, que ama tanto a esta dama y sería capaz de todo con tal de verla feliz, decide ayudar a su contrincante: Cristián será el rostro bello y Cyrano pondrá la belleza de su propia alma en cartas y versos para conquistar el corazón de Roxanne.

¡Y lo logra! Pero debe de pronto partir a la guerra. Roxanne lo espera recluida en un Convento, como se acostumbraba en el SXVII, y Cyrano la visita día tras día.