Tres agentes policiales quedaron detendios por el homicidio de Ricardo José Bazán (29), ocurrido la noche del miércoles en esa zona del oeste de la ciudad de Mendoza, y la Justicia investiga un posible caso de gatillo fácil.
Ricardo José Bazán habría escapado de un control vehicular que le hicieron a una camioneta. El hombre ultimado recibió un disparo en la cintura y tenía antecedentes. Investigan si escapó del control porque tenía un pedido de captura por violencia de género y sabía que iba a quedar detenido.
El hecho de sangre se conoció pasadas las 22 cuando Bazán llegó herido al Centro de Salud de La Favorita. El médico de guardia confirmó que murió producto de un disparo que recibió en la zona de la cintura y la causa quedó en manos del fiscal Horacio Cadile.
A raíz de la participación de los policías en el hecho, se demoró a los tres que participaron en ese control.
Al de 27 años le secuestraron el arma provista, es decir, una pistola Bersa Thunder calibre 9 milímetros con el cargador y 24 proyectiles. En tanto, al otro uniformado de 44 años, quien trabaja en la Comsiaría 59ª, le confiscaron una pistola Taurus calibre 9 milímetros y 24 municiones. En tanto, al tercer efectivo, también de 27 años, le quitaron otra 9 milímetros marca Taurus. También de la comisaría solicitaron el libro de novedades y una escopeta Pietro Bereta. Fuente: Sitio Andino - Mdz